En un barómetro especial por la COVID-19, elaborado mediante 3.000 entrevistas telefónicas entre el 30 de marzo y el 7 de abril, el primero desde la declaración del estado de alarma, el PSOE cae del 31,9 por ciento de la encuesta de marzo al 31,2, en tanto que Unidas Podemos y sus confluencias pasarían del 12,9 por ciento de la anterior encuesta a un 12 por ciento en estimación de voto.
Vox también perdería bastante fuelle, del 14,8 por ciento de marzo al 13 por ciento, en tanto que Ciudadanos rompe su senda descendente y sube del 7,2 de la anterior encuesta a un 7,6 por ciento.
El siguiente partido en estimación de voto sería ERC, que sube casi un punto hasta el 3,3 por ciento (2,4 en marzo), seguido de Más País-Compromís, que también asciende ligeramente, con el 1,5 por ciento de los sufragios.
JxCat, gana dos décimas, y se queda en el 1,4 por ciento, mientras que Bildu perdería, según el CIS, más de la mitad de sus apoyos, pasando del 1,2 por ciento de marzo, a un 0,5 en abril.
El PNV obtendría un 1,2 por ciento, tres décimas menos, en tanto que la CUP subiría ligeramente hasta el 0,6 por ciento en estimación de voto, según el CIS.
Por su parte, el Pacma, partido sin representación parlamentaria, tendría un 1,1 por ciento, Coalición Canaria un 0,4, y la coalición Navarra Suma, un 0,3 por ciento en estimación de voto.
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