Eso es lo que han establecido los técnicos que comparecen a diario de forma telemática ante los medios de comunicación, como el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien ha advertido este lunes que el 27 «no se va a abrir la puerta y decir: Niños a jugar», sino que van a ser salidas «controladas» que no implican un incremento del riesgo.
«No van a salir libremente para empezar a jugar con todos sus vecinos como hacían antes», ha asegurado el epidemiólogo, quien ha advertido de que «si la gente piensa que esto va a ser; abro la puerta y que se junten con los niños de todo el vecindario, podemos tener algún problema; es una cuestión de responsabilidad».
Hay que tener en cuenta además que, después de un mes y una semana de confinamiento, la probabilidad de que los niños estén infectados ahora mismo es muy baja.
Pero, además, en este Consejo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, podría abordar otras medidas que podrían plantearse los técnicos si los marcadores relacionados con la epidemia son favorables.
La propia portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, no ha descartado que, tras la salida de los menores el 27, «puedan haber otras medidas que se puedan ir desplegando a lo largo de esa semana».
Hacer deporte, de forma individual, según ha dicho, es una de las cuestiones que están estudiando los técnicos y que se desarrollara en función de esos marcadores, que van a ser la guía para que el Gobierno adopte una decisión u otra.
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