El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha remitido este domingo al presidente del Gobierno las «Recomendaciones sanitarias para la estrategia de Transición», un documento que incide en que la reducción máxima del número de casos de COVID-19 exigiría «fuertes medidas de distanciamiento social»,
En este sentido, los expertos no descartan el confinamiento «total o parcial» de grandes grupos de población durante largos periodos con el fin de poder eliminar el virus o dar margen al desarrollo de una vacuna que podría tardar más de doce meses en estar disponible.
Las recomendaciones trasladadas al Ejecutivo se centran en cuatro áreas: la asistencia sanitaria; la vigilancia epidemiológica; la identificación y contención precoz de las fuentes de contagio; y las medidas de protección colectiva.
Aunque el objetivo es reducir el número de casos hasta un nivel asumible por el sistema sanitario, los hospitales deben estar preparados para disponer, en caso de necesidad, del doble de camas de UCI que tenían antes de la crisis, e identificar espacios que permitan un incremento «de hasta el triple» de esa capacidad.
Si fuera necesario se deberá habilitar capacidad hotelera u otras instalaciones para proceder a ese aislamiento «supervisado» de casos leves cuando no pueda hacerse efectivo en el domicilio.
Todo para garantizar la asistencia a todos los pacientes y asegurar la protección de los colectivos más vulnerables minimizando coste humano, social y económico durante la gestión de la epidemia.
Para ello es crucial reforzar la asistencia sanitaria -también en la atención primara- aumentar la dotación de equipos de protección individual y pruebas «PCR» para una adecuada vigilancia epidemiológica y para poner identificar y contener cualquier fuente nueva de contagio.
El documento señala que según se vaya avanzado en esos objetivos se podrán ir tomando decisiones que permitan un progresivo aumento de la movilidad y de la actividad laboral.
De momento, este domingo ha sido el primer día en el que los menores de 14 años han podido salir de nuevo a la calle, acompañados de un adulto, por espacio de una hora, en un radio de un kilómetro de su domicilio y siguiendo las indicaciones de distancia e higiene.
A pesar de los vídeos que circulan en las redes sociales y que alertan de numerosos casos en los que se incumplen las medidas, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha asegurado que las recomendaciones del Gobierno «se están cumpliendo de manera general».
Tampoco ha descartado hacer «algún ajuste» si fuese necesario a la espera de ir viendo cómo evolucionan las cosas.
El director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias de Sanidad, Fernando Simón, ha pedido especial cuidado en la actividad entre nietos y abuelos o con personas vulnerables y ser muy cuidadosos incluso cuando el nivel de transmisión sea casi indetectable.
Y todo el mismo día en el que las cifras de fallecidos han caído hasta los 288, 90 menos que ayer, con lo que suman ya 23.190, en tanto que los nuevos casos diagnosticados en las últimas 24 horas han descendido a los 1.729 y hacen un total de 207.634.
Siguen aumentando las altas que, con otras 3.024 personas curadas en 24 horas, ascienden a 98.732, según los últimos datos facilitados por el departamento que dirige Salvador Illa.
El propio ministro ha destacado en la rueda de prensa ofrecida tras la séptima Conferencia de presidentes de Comunidades y Ciudades Autónomas, que con la tendencia que muestran estos datos «estamos consolidando el descenso y doblegando definitivamente la curva».
Por su parte, los presidentes autonómicos han insistido en su reunión con Pedro Sánchez en la defensa de sus respectivos planes territoriales de desconfinamiento para tratar de reactivar la economía en cada una de las regiones.
En este sentido, la vicepresidenta cuarta del Gobierno, Teresa Ribera, ha expresado su confianza en que la progresiva recuperación económica no suponga un debilitamiento o detrimento de otros aspectos de la salud pública, como la calidad del aire a causa de la contaminación.
También se ha referido a la importancia de recuperar progresivamente espacios urbanos, pero cumpliendo las medidas de distanciamiento e higiene aconsejadas.
Ha citado como ejemplo las ideas que ya se han puesto encima de la mesa en algunas zonas de Italia para incrementar el ancho de las aceras y facilitar así el distanciamiento de las personas, y la posibilidad de agrandar las zonas peatonales o los carriles para las bicis para favorecer la movilidad de los ciudadanos sin necesidad de volver a recurrir al vehículo privado.
Estrella Digital