Con esta iniciativa, el partido de Santiago Abascal quiere acabar con el «enchufismo» en la política, después de que el Gobierno haya nombrado a 25 directores generales no funcionarios.
❌ @VOX_Congreso propone acabar con el enchufismo en política: los Directores Generales tendrán que ser funcionarios sin excepciones.
¿Cuál es el objetivo? Garantizar la absoluta tecnificación, independencia y profesionalización de este personal. https://t.co/Oiru9xn2Yw
— vox_es (@vox_es) May 12, 2020
El artículo 66.2 de la Ley del Régimen Jurídico del Sector Público señala que los nombramientos deben efectuarse entre funcionarios de carrera del Estado, de las comunidades autónomas o de las entidades locales, «salvo que el Real Decreto de estructura permita que, en atención a las características específicas de las funciones de la dirección general, su titular no reúna dicha condición de funcionario».
Aunque Vox precisa que todos los gobiernos han hecho uso de esta excepcionalidad para «nombrar a dedo» a los directores generales «no profesionales», ha denunciado que «el culmen ha llegado con este Gobierno autodenominado ‘progresista y del cambio'».
«Esto ha dejado de convertirse en una excepción para convertirse en una opción», advierte Vox, que con su proposición pretende garantizar la «absoluta tecnificación y profesionalización» de los directores generales.
En su opinión, estos cargos pueden y deben ser elegidos entre personas de confianza política, siempre que sean funcionarios de carrera.
No obstante, Vox cree que esta modificación debe enmarcarse en un contexto de «necesaria modernización» y de reforma de la función pública, que incluya la aprobación de un Estatuto del Directivo Público, que separe de forma «clara y contundente» la selección y actuación de los órganos superiores de la Administración General del Estado.
Estrella Digital