En una entrevista que este domingo publica «La Vanguardia», el político gallego hace este comentario al referirse a las conferencias de presidentes que durante esta crisis han mantenido los dirigentes autonómicos con el presidente del Gobierno.
«Un dirigente catalán es lógico que hable de lo suyo, para eso ha sido elegido, pero hablar de lo suyo no significa que no se pueda hablar de lo nuestro, y en la política catalana parece que lo suyo es lo contrario de lo nuestro», argumenta Feijóo.
Por ello, concluye: «Me parecen más inteligentes los planteamientos vascos, sin compartirlos, que los de los partidos independentistas, y si vamos a los hechos creo que les va mejor a unos que a otros», apostilla.
«Aquí se necesitan muchos puentes y pocos muros, y Cataluña no ha tenido suerte con sus políticos, que saben hacer más muros que puentes», apunta en otro momento de la entrevista.
Con todo, Feijóo cree que «todos» los presidentes autonómicos han estado «a la altura de la circunstancias» ante esta pandemia, pero se muestra crítico con la gestión del Gobierno, del que dice que no ha consultado con las comunidades «la mayoría de las decisiones».
Preguntado por la llamada cogobernanza, Feijóo asegura que «ha estado ausente», aunque admite que «a medida que el PNV presionaba en el Congreso nos escuchaban un poco más».
Sin embargo, remarca que «la fase 3, la más difícil, nos la dejan a las comunidades. Ahora estamos en el momento más complejo, y las autonomías asumimos todo el riesgo».
«Ha funcionado mejor el sistema autonómico (durante esta crisis) que el Gobierno central, cuya gestión ha fallado», sentencia el presidente gallego, que el 12 de julio intentará revalidar, por cuarta vez, la mayoría para presidir la Xunta.
Preguntado por si pactaría con Vox para gobernar, dice que se presentaría a la investidura y entonces «o Vox me apoya o deja gobernar a nacionalistas y Podemos», pero que los votantes del PP «no entenderían» que negociara un pacto con ese partido.
En cuanto a la crispación de la política española, culpa al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de ella: «Hay que reconocer que la estrategia de crispación la saben hacer, y a veces contagian y nos hacen cometer errores».
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