Según informan fuentes del Ministerio de Defensa, los militares dejaron ayer de vigilar la central nuclear de Trillo (Guadalajara) y este martes se replegarán de la de Cofrentes, por lo que solo siguen haciendo esas labores en la de Almaraz (Cáceres).
De la vigilancia de estas centrales se han encargado tanto militares del Ejército del Aire como de Tierra, tras recibir la oportuna formación por parte de la Guardia Civil, que habitualmente realiza estas labores.
A día de hoy continúan desplegados en la operación Balmis casi 300 efectivos en ocho localidades, frente a los alrededor de 8.000 que llegaron a actuar en los peores momentos de la pandemia.
Siguen, han indicado las fuentes, realizando actividades de formación en desinfección con distintos organismos en la Escuela Nacional de Protección Civil y apoyando en el transporte al Banco de Alimentos de Madrid.
A estos militares hay que sumar los 251 efectivos de la sanidad militar que trabajan en Balmis en hospitales y centros dependientes de la Inspección General de Sanidad de la Defensa.
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