Mientras continúa el goteo de informaciones con detalles sobre los presuntos negocios ocultos del anterior jefe del Estado, los reyes prosiguen este miércoles en Castilla y León su gira autonómica tras levantarse el estado de alarma decretado por la pandemia de coronavirus.
No ha habido referencia alguna en esa gira a la situación del rey emérito, pero sí se han ido sucediendo las manifestaciones de diversos miembros del Gobierno en las que se desvincula a Felipe VI de los negocios de su padre aunque, a la vez, se resalta la necesidad de garantizar la transparencia y ejemplaridad de la Corona.
Algo que en el Ejecutivo recalcan que debe impulsarse desde la propia institución.
El mensaje más diáfano en esa dirección lo lanzó este martes la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, cuando en la conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, afirmó que el Gabinete de Pedro Sánchez no va a adoptar ninguna decisión en relación con el rey Juan Carlos.
Pero a renglón seguido puntualizó que «celebra las medidas pasadas y futuras» que Felipe VI pueda impulsar para garantizar la ejemplaridad en la Corona.
Montero, que insistió en que la Justicia debe ser igual para todos, no concretó si el Gobierno sería partidario de que don Juan Carlos abandone el Palacio de la Zarzuela y dijo que la línea de actuación en favor de la transparencia y la rendición de cuentas emprendida por Felipe VI desde que arrancó su reinado, ha sido «ajustada y adecuada».
A él insistió que le corresponde decidir qué nuevos pasos da. Entre esos, además de su salida de la Zarzuela, en los medios se barajan hipótesis como la retirada del título de rey y que deje de formar parte de la Familia Real.
Sin pista alguna desde la Corona sobre la posibilidad de que Felipe VI vaya a adoptar alguna de esas medidas o de que el propio rey Juan Carlos las facilite por iniciativa propia, se mantiene también la incógnita de que, en caso de que así se comunicara próximamente, el Ejecutivo ya tuviera conocimiento de ello.
Pedro Sánchez no ha querido ahondar este miércoles en el asunto porque afirma haber sido ya «muy claro».
En rueda de prensa en Suecia y al plantearle si el anterior jefe del Estado debería abandonar Zarzuela o privársele del título de rey, se ha remitido a sus palabras de hace una semana en las que dijo que las informaciones que estaban apareciendo eran «inquietantes» y «perturban a todos. A mí también», apostilló.
Además, agradeció al rey que esté marcando distancias con decisiones como la del pasado 15 de marzo, cuando anunció que renunciará a la herencia de su padre y le retiró la asignación que recibía del Estado
Una decisión hecha pública ante las informaciones sobre el presunto pago de comisiones por parte de Arabia Saudí en la construcción del AVE a la Meca, asunto que está siendo investigado por la Fiscalía del Tribunal Supremo.
También este miércoles el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha mostrado la preocupación del Gobierno por todo ello aunque ha insistido en la necesidad de mantener la confianza en la institución de la monarquía tras los pasos en favor de la transparencia dados por Felipe VI.
«Ese es el sentido en el que tiene que avanzar la jefatura del Estado», ha subrayado Campo, quien al plantearle si el Gobierno espera alguna medida más del rey en relación con su padre, como que abandone la Zarzuela, se ha limitado a contestar: «Ni esperamos ni dejamos de esperar».
El rey y Sánchez coincidirán este jueves en el Palacio Real en el acto de Estado en homenaje a las víctimas de la pandemia y al personal que ha luchado contra ella en primera línea.
Al día siguiente, los reyes protagonizarán en el País Vasco la décima visita de su gira autonómica.
Estrella Digital