La investigación que ha conducido al arresto de este empresario, de 30 años y nacionalidad mexicana, ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo III de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedades documentales (UCRIF) de la Comisaría Provincial de Alicante.
Los agentes comprobaron que esa mercantil disponía de tres naves donde trabajaban entre «45 o 50 personas en dos turnos», según un comunicado de la Policía Nacional.
Con el apoyo de la Inspección de Trabajo de Alicante y la Unidad Adscrita de la Policía Nacional a la Comunitat Valenciana, se realizó una inspección del centro de trabajo donde se localizó en ese momento a 24 empleados de diferentes nacionalidades
De estos, solo dos estaban dados de alta en la Seguridad Social y «el resto manifestó no tener contrato laboral y realizar jornadas de 12 horas ininterrumpidas», según la nota de prensa.
Además, siete de estos trabajadores se encontraban de forma irregular en España.
Continuando con las indagaciones, los policías descubrieron que, del total de trabajadores de la empresa -casi cincuenta-, únicamente seis estaban dados de alta y disponían de contrato.
Los inspectores de Trabajo iniciaron los expedientes laborales sancionadores correspondientes, mientras que los agentes de la Brigada de Extranjería detuvieron al administrador único de la mercantil como presunto autor de un delito contra los derechos de los trabajadores.
Las diligencias policiales de este caso han sido remitidas a los juzgados de Elche.
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