La Consejería de Sanidad ha adjudicado por la vía de urgencia a una empresa del grupo Quirón un contrato para la «detección de contactos estrechos» de coronavirus, mediante un equipo de 22 sanitarios (20 auxiliares de enfermería y 2 médicos) durante tres meses y por un importe de 194.223 euros, y que deberán realizar al menos 190 encuestas diarias, según publica este lunes el portal de contratación de la Comunidad de Madrid.
El contrato se adjudicó el 7 de agosto «por procedimiento sin publicidad», después de que la Dirección General de Salud Pública madrileña anunciara «la dificultad para cubrir los puestos ofertados» y tras recurrir a universidades y municipios en busca de voluntarios no remunerados.
En declaraciones a Efe, Cepeda ha tachado de «esperpento y escándalo» la adjudicación de los rastreos a una empresa y ha considerado que el Gobierno de la Comunidad de Madrid está «mareando la perdiz» desde que acabó el estado de alarma a finales de junio.
«De pedir voluntarios gratis hace solo unos días ahora ofrece casi 3.000 euros por rastreador al mes», ha apuntado el portavoz socialista, quien ha lamentado la «falta de planificación» del Gobierno de Ayuso que, a su juicio, lleva a cabo «acciones de forma improvisada».
Tras preguntarse por lo que va a ocurrir a partir de septiembre con el transporte público y la «vuelta al cole», ha afirmado que no hay «ninguna» respuesta del Gobierno de Ayuso, «más dedicado a ocultar datos y a buscar la confrontación con el Gobierno de Pedro Sánchez» .
«(Ayuso) Debería preocuparse más por la salud de los madrileños y no en que se haga negocio con ella», ha añadido.
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