Para contener el avance del coronavirus en Cataluña, cuyos datos epidemiológicos van al alza aunque por debajo de la media de España, Torra ha decidido crear este comité de crisis que estará integrado por él mismo, el vicepresidente del Govern, los consellers de Presidencia, Interior, Salud y Educación, el secretario de Salud Pública, el director general de Centros Docentes y el jefe del gabinete jurídico de la Generalitat.
«Ponemos en marcha la Operación Septiembre y es una cuenta atrás que dependerá de todos», ha avisado tras admitir que Cataluña no se encuentra en una «situación de estabilización, sino de crecimiento persistente» de casos de coronavirus.
«Necesitamos volver a enviar una señal de alerta a la sociedad catalana», ha dicho Torra, quien ha recalcado que aunque la tasa de contagios se sitúa por debajo de la media estatal, ello no supone «ningún consuelo», puesto que los datos de rebrotes «preocupan» y hacen necesario pedir un nuevo «esfuerzo» a la ciudadanía.
«No estamos sólo ante un problema sanitario gravísimo, sino ante un problema económico, social, y educativo», ha recalcado en la misma línea que ha hecho poco después el secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, quien ha alertado: «Hemos retrocedido tres semanas» en cuanto a la evolución de la pandemia.
«Esto es una carrera de fondo, no podemos continuar de esta manera. En los próximos días aparecerán más casos, la curva no nos gustará pero lo tenemos que parar», ha subrayado Argimon.
Por otro lado, Torra ha explicado que ha convocado para mañana una reunión extraordinaria de su Ejecutivo para aprobar el plan de regreso a las escuelas, que se volverá a reunir, esta vez de forma ordinaria, el jueves.
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