El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida y la vicealcaldesa, Begoña Villacís, han anunciado este jueves en la rueda de prensa posterior a la Junta del Gobierno, la primera de este nuevo curso, ambas restricciones.
Junto a ambos cierres, el Ayuntamiento pondrá en marcha una campaña de prevención en la que voluntarios informarán a la ciudadanía sobre el correcto uso de la mascarilla y de las medidas de higiene para evitar contagios. Una medida de información que se intensificará en los puntos donde se registran más positivos.
Madrid tendrá además más «presencia en la calle», no solo informativa, también punitiva, aumentando la presencia policial y persiguiendo el botellón.
El alcalde de la capital ha señalado que estas medidas no son «especialmente gravosas» sino «razonables» y buscan concienciar sobre la necesidad de parar la curva ascendente de contagios.
«Apelamos a los ciudadanos, apelamos al cumplimiento de las normas», ha señalado el regidor madrileño, admitiendo que es muy difícil controlar las más de 3.000 zonas verdes de la capital.
La vicealcaldesa ha mostrado su preocupación por el repunte en los contagios y ha dicho que perciben «una cierta relajación de la responsabilidad individual» sobre todo por parte de los jóvenes y por eso se toman medidas.
«Si algo hemos aprendido es que hay que aprender de los errores. Retrasar las cosas no sirve de nada», ha afirmado Villacís.
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