En una visita al albergue juvenil del municipio madrileño de Rascafría, Ossorio ha cifrado en 66.000 los profesores que se han sometido a los test serológicos, de los 72.000 que fueron convocados, es decir, el 90 % de los docentes.
«Cuántos más vayan, más seguridad», ha dicho Ossorio sobre las pruebas de anticuerpos a alrededor de 100.000 docentes ante el inicio del curso escolar en la región, que comenzó de forma escalonada el viernes con el primer ciclo de Infantil (0-3 años).
Estos más de 2.000 profesores que han dado positivo en los test serológicos se comenzaron a realizar ayer las pruebas PCR y continuarán en los próximos días y, de resultar positivo, serán sustituidos por interinos.
Estos docentes sustitutos serían adicionales a los 10.610 profesores que contratará la Comunidad de Madrid para hacer frente a este curso marcado por una segunda ola de contagios.
Ossorio ha comentado que la Consejería de Educación disponía de muy poco tiempo para hacer los 100.000 test y ha pedido de nuevo disculpas por las colas que se formaron en el Instituto de Educación Secundaria La Paloma el miércoles, el primer día de la convocatoria, que obligaron a posponer las pruebas porque los asistentes no podían mantener la distancia de seguridad.
El consejero ha reconocido la dificultad de reducir las ratios en las aulas a 20 alumnos, para lo que se están buscando espacios adicionales dentro de los centros educativos que, de no encontrarse, podrían ser locales facilitados por los ayuntamientos o módulos prefabricados.
Ha hecho un llamamiento a la tranquilidad ante las medidas impulsadas por la Comunidad de Madrid para la vuelta a las aulas, al tiempo que ha admitido que «algún contagio habrá».
Sobre la huelga del profesorado convocada para el 22 y 23 de septiembre, Ossorio ha opinado que los motivos son «estrictamente políticos», ya que cuando fue anunciada «no conocían el protocolo y no había rebrotes».
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