En una entrevista con Efe, el portavoz del Ejecutivo regional, Enrique Ossorio, ha defendido estas normativas «por sus objetivos».
«No nos vamos a apear porque son objetivos que creo que cualquier persona de bien tiene que desear», ha dicho Ossorio, que considera, no obstante, que estas leyes tienen «una literatura muy mala que se podría mejorar» ya que «contienen muchos artículos que podrían ser texto de un mitin».
El Gobierno de Ayuso tiene previsto presentar a finales de octubre, según Ossorio, los presupuestos de la Comunidad de Madrid para 2022, tras las dos sucesivas prórrogas de las cuentas públicas de 2019, aprobadas con Ángel Garrido como presidente de la región y Ciudadanos como oposición.
Las fricciones entre Vox y Ciudadanos, antiguo socio de Gobierno de Ayuso, imposibilitaron la aprobación de los presupuestos de 2021 hasta la ruptura del Ejecutivo de coalición y la posterior convocatoria de elecciones casi a mitad año, por lo que la presidenta madrileña se decantó por centrarse ya en las cuentas de 2022.
Con sus 65 escaños, a cuatro de la mayoría absoluta, Ayuso necesita el apoyo de Vox para poder aprobarlas, para lo cual el partido de Monasterio puso entre sus condiciones la derogación de las leyes LGTBI o el cierre de Telemadrid.
«Nosotros tenemos que ver las propuestas que haga Vox y todas aquellas cosas que pensamos que vayan contra nuestros principios o que vayan contra lo que es bueno para los madrileños. Nosotros, lógicamente, defenderemos no aceptarlas», ha subrayado Ossorio.
Esas serán las «líneas rojas» del Gobierno de Ayuso en la negociación, por lo que si Vox pide «algo negativo» para los madrileños intentarán «soslayarlo». EFE
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