La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, llamó ayer lunes al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para pedirle la retirada de la tanqueta o vehículo blindado BMR utilizado por la Policía ante las protestas de los huelguistas de Cádiz.
La propia Díaz ha informado de su conversación con Marlaska en declaraciones a los periodistas en el Congreso, donde ha recordado que los manifestantes «no son delincuentes», sino que están «legítimamente defendiendo sus derechos». «Estamos hablando de derechos fundamentales», ha recalcado.
Fuentes próximas a la vicepresidenta han precisado que Díaz y Marlaska hablaron ayer por teléfono y que la petición fue bien recibida. Otras fuentes del Ejecutivo han apuntado que este asunto no ha sido tratado en la reunión del Consejo de Ministros celebrada este martes.
Las críticas de los diputados de Unidas Podemos por el uso de ese vehículo se han repetido en el Congreso durante el debate de los Presupuestos Generales del Estado mientras en la manifestación de apoyo a la huelga convocada en Cádiz se han producido enfrentamientos entre manifestantes y Policía.
«Señor ministro Marlaska, saque las tanquetas de las calles de Cádiz, siempre las puede devolver a la ministra de Defensa», ha manifestado el presidente del grupo confederal de Unidas Podemos, Jaume Asens, en el pleno del Congreso durante su intervención referente a los presupuestos del Ministerio de Justicia para 2022.
«No necesitan tanquetas, necesitan trabajo digno», ha manifestado Asens, mismo argumento expuesto en posteriores intervenciones por diputados como Juan Antonio Delgado o Ismael Cortés.
La Policía no ha utilizado el polémico blindado -que se emplea para retirar barricadas- en la manifestación. El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández Peñalver, ha asegurado que sólo se utilizará «en momentos puntuales de una situación de máxima tensión».
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