Ribera ha participado en el I Foro Económico Español ‘Castilla-La Mancha: Logros y Desafíos», organizado por El Español/El digital de Castilla-La Mancha, en Toledo, donde ha respondido a preguntas sobre las elecciones de Castilla y León, donde el PP ha conseguido 31 escaños, dos más de los que tenía pero lejos del objetivo de acercarse a la mayoría absoluta, por lo que dependerá de Vox para gobernar, ya que este partido ha conseguido 13 representantes; mientras que el PSOE, con 28 parlamentarios, no tiene posibilidades de sumar con otros partidos.
La ministra, tras señalar que el PSOE se ha quedado a 16.000 votos de superar al PP y que eso «no es tanto», ha precisado que «sí estamos peor que hace unos meses, porque jugar a las aventuras en un escenario complejo es muy peligroso», ya que «se abre la caja de Pandora en la que se anima el camino en esa espiral antisistema, antilibertad, antiigualdad y antimujer», lo que ha afirmado que es «enormemente peligroso» puesto que la historia muestra que » siempre pierde y se escora quien entra en ese juego tan terrible», ha dicho.
Ha añadido que también es interesante otro punto, el ascenso de los movimientos localistas, provinciales e incluso UPL, que a su juicio muestra hasta qué punto hay un sentimiento, por parte de un número importante de ciudadanos, de vivir en lugares que no importan.
Y esto se da particularmente en Castilla y León, cuya realidad, ha asegurado la ministra, no es igual que Castilla-La Mancha, porque Castilla y León es la comunidad que más población ha perdido durante más de tres décadas «a costa de reducir y perder prestación de servicios».
Ribera se ha mostrado escéptica respecto a la posibilidad de que «una visión de reivindicación local refleje adecuadamente la manera de configurar valores, pero refleja un malestar al que hay que hacer frente», ha dicho. EFE
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