El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pedirá mañana en La Palma, en la Conferencia de Presidentes, que el Ejecutivo central realice una bajada de impuestos «con carácter general» hasta final de año para reducir el impacto que la invasión de Ucrania tienen en la economía de las familias y de las empresas.
Según han informado fuentes del Gobierno gallego, esta es una de las propuestas que realizará Galicia en la conferencia y está recogida en un documento que se entregará al presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, junto con diferentes medidas para intentar contener el precio de la energía.
El objetivo es que el Gobierno central «rectifique» algunas de sus políticas de los últimos meses y tome medidas «inmediatas y urgentes» para reducir el fuerte impacto de la guerra en Ucrania.
El documento tiene cinco ejes principales, entre ellos el «total apoyo» de la Xunta al Gobierno en los debates económicos que se están llevando a cabo en el ámbito de la Comisión Europea, pero pidiendo al mismo tiempo que se articulen también medidas de ámbito doméstico «sin esperar a la regulación de la UE».
En este ámbito se enmarca la petición de una bajada generalizada de impuestos hasta final de año, especialmente sobre la electricidad, el gas y los carburantes, pero no solo estos, como había avanzado Feijóo esta semana.
Además, la Xunta reclamará que comunidades y ayuntamientos sigan apoyando a los colectivos más vulnerables para evitar cortes de suministros y que las administraciones inicien planes para frenar el consumo energético.
El Gobierno gallego propondrá medidas específicas para los sectores más afectados por la subida de precios y la falta de suministros, como el pesquero, agroganadero, automoción, turismo, construcción, y electrointensivo, y «reenfocar» la necesaria transición energética para que no afecte a sectores considerados cruciales, como la automoción o la industria del aluminio.
También instará al Gobierno a reflexionar sobre políticas que considera que, en lugar de aliviar a los hogares y empresas, han «agudizado» su difícil situación económica, como implantar el peaje en las autovías o la reforma de las cuotas de autónomos.
Según explica la Xunta, su objetivo es salir de la Conferencia con medidas que «den certeza y tranquilidad a familias e industria en un momento muy complicado para la economía», con una inflación que está en cifras máximas en 30 años, destaca.
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