Así lo ha explicado el ayuntamiento este viernes a raíz de una información que publica elDiario.es según la cual Anticorrupción investiga «comisiones millonarias» obtenidas por dos empresarios, uno de ellos Luis Medina, hijo del duque de Feria y de Naty Abascal, que contactó con el cargo del ayuntamiento «que durante aquellos días se afanaba en cerrar contratos» para adquirir equipos de protección contra el coronavirus.
Según las fuentes del ayuntamiento que dirige José Luis Martínez-Almeida, los contratos que están siendo investigados fueron aprobados los días 23 y 25 de marzo de 2020 «por unanimidad de todos los grupos políticos» en el consejo de administración de la empresa municipal de Funeraria, que a las 10:00 horas del lunes próximo, día 4, se reunirá en consejo extraordinario.
En dicho consejo figuran como integrantes, recuerdan fuentes municipales, Javier Barbero, de Más Madrid; Ramón Silva, del PSOE, y Pedro Fernández, de Vox.
La información de elDiario.es dice que Luis Medina habría recibido un millón de euros por poner en contacto con los responsables de compras del consistorio a otro empresario amigo suyo, que se embolsó cinco millones. La Fiscalía persigue indicios de falsedad documental, delito fiscal y blanqueo de capitales en la intervención de los dos intermediarios.
El Ayuntamiento de Madrid es «el primer interesado en conocer si se ha producido algún delito con esos contratos, que le ha remitido a la Fiscalía la documentación requerida, contratos, correos y mensajes de WhatsApp, y que así «está prestando la máxima colaboración con la Justicia y lo seguirá haciendo hasta que se esclarezcan todos los hechos», han dicho las fuentes.
Añaden que todos los contratos de emergencias de la pandemia de la covid-19 también han sido remitidos al Tribunal de Cuentas.
Los tres contratos que investiga la Fiscalía son: uno por 6,6 millones de dólares para la adquisición de un millón de mascarillas FFP2/ KN95, en el que se incluyó «una donación de 183.000 de las mismas características»; otro por 4,8 millones de dólares para la adquisición de 250.000 pruebas; y un tercero por cinco millones de dólares para la compra de 2,5 millones de pares de guantes.
De esta última cantidad se devolvieron al ayuntamiento 4 millones de dólares «por no ser el modelo acordado en la compra».
En total se pagaron 12,3 millones de dólares a la empresa Leno, explica el ayuntamiento, y agrega que los tres contratos se hicieron «en precio según oferta y demanda del momento».
El ayuntamiento informa de que entre marzo y julio de 2020 se realizaron 59 contratos de emergencia para adquirir material para los empleados municipales, todos ellos remitidos al Tribunal de Cuentas. EFE
A.M.