En declaraciones a SER Catalunya, Ribera ha destacado que «la facilidad que ofrece Hacienda permite que las pequeñas gasolineras puedan contar con un mecanismo de apoyo inmediato» para hacer frente a la rebaja de los carburantes, y evitar así «tensiones de caja».
«Es natural que Hacienda lo que pida es que se solicite (el anticipo) y que esté respaldado por las cifras de negocio de las estaciones de servicio en meses anteriores para tener una idea aproximada de la cifra razonable a remitir inmediatamente. Es posible que pueda haber un desajuste razonable de uno o dos días», ha señalado la ministra.
El sector de las estaciones de servicio ha elevado la voz contra el Gobierno por la obligación de aplicar a partir de la medianoche pasada un descuento de 20 céntimos por litro al considerar que la rebaja lastra su liquidez y coloca a parte de las gasolineras al borde del concurso de acreedores. EFE