El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se dirigirá este martes al Parlamento español y a toda la ciudadanía a través de una intervención por videoconferencia en el Congreso de los Diputados en la que previsiblemente estará muy presente la masacre descubierta en Bucha, a las afueras de Kiev, tras el repliegue de las tropas rusas de esta ciudad.
Zelenski, que ha intervenido en numerosos parlamentos y actos internacionales, ha asegurado en su última entrevista, el pasado domingo en un canal de televisión estadounidense, que la matanza de Bucha es un «genocidio» contra el pueblo ucraniano, toda vez que las imágenes muestran a cientos de civiles maniatados que han sido ejecutados en la calle.
El presidente ucraniano hablará en el hemiciclo del Congreso ante el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y doce ministros (las vicepresidentas Calviño y Díaz; Presidencia, Exteriores, Justicia, Defensa, Portavoz, Sanidad, Igualdad, Derechos Sociales, Ciencia y Seguridad Social) y ante la presidenta del Congreso, Meritxell Batet y diputados y senadores, en un acto que está previsto que se inicie a las 17,00 horas.
Batet abrirá el acto institucional con unas palabras de bienvenida que mostrarán la solidaridad de España con el pueblo ucraniano, tal como avanzó en la invitación oficial que le envió a Zelenski en la que le señalaba su admiración por «la decidida lucha de los ciudadanos ucranianos en la defensa de su libertad y soberanía» ante una «agresión militar e injustificada».
El pasado 15 de marzo la presidenta del Congreso invitó a Zelenski a participar en el pleno del Congreso tras haber recibido la petición unánime de todos los partidos políticos de la Cámara que firmaron una iniciativa con «la más rotunda condena» del Parlamento a la invasión de Ucrania.
Precisamente, los partidos políticos están estudiando desde ayer una nueva declaración institucional propuesta por Ciudadanos para condenar la masacre ocurrida a las afueras de Kiev e instar al Ejecutivo español a apoyar todas las acciones dirigidas a juzgar esos crímenes de guerra.
La presidenta del Congreso ha manifestado la cercanía de España al pueblo ucraniano en diferentes actos institucionales que ha tenido desde que comenzó la guerra, entre ellos las visitas de las presidentas de los parlamentos de Lituania y Letonia y del presidente del parlamento de Estonia a España y la reunión que mantuvo con la presidenta del parlamento polaco en Eslovenia.
«Estoy segura de que su intervención ante el pleno del Congreso constituirá una magnífica oportunidad para que la Cámara y todos los españoles, así como los miles de ciudadanos ucranianos residentes en nuestro país, puedan escuchar su mensaje y expresarle nuestro más firme respaldo», consideró Batet en la misiva que remitió a Zelenski.
Tras la intervención de Zelenski, el presidente del Ejecutivo tomará la palabra para trasladar al presidente ucraniano su apoyo en esta guerra y su decisión de que el presidente ruso, Vladimir Putin, sea juzgado por crímenes contra la humanidad.
Sánchez ha mostrado en las últimas horas su «horror, dolor e indignación» ante «las terribles imágenes» que han llegado de Bucha y ha aseverado que «los crímenes de guerra que se están cometiendo no pueden quedar impunes».
Una matanza que según el ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, «es la peor masacre en Europa desde la II Guerra Mundial» y de la que ha alertado también la organización de derechos humanos Human Rights Watch (HRW).
Es previsible que el presidente de Ucrania vuelva a reclamar un apoyo contundente de los países de la Unión Europea como ya ha hecho ante el Parlamento alemán.
Tras la masacre de Bucha la UE ha afirmado que va a avanzar, «con carácter de urgencia», en la preparación de nuevas sanciones contra Rusia. Los Veintisiete apoyan «plenamente» la investigación iniciada por el fiscal de la Corte Penal Internacional sobre crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, así como el trabajo de la Comisión de Investigación de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
La intervención de Zelenski se produce dos días después de que Ucrania y Rusia hayan pedido que el Consejo de Seguridad de la ONU aborde esa matanza de civiles, por el lado ucraniano para dirimir una «masacre deliberada» y por el lado ruso por las «atroces provocaciones de los radicales ucranianos en Bucha», ya que Rusia niega estos hechos.
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