Oviedo, 20 abr (EFE).- El consejero de Salud de Asturias, Pablo Fernández, ha hecho este miércoles un llamamiento a mantener el uso de las mascarillas en espacios interiores mientras el Principado siga en riesgo alto por covid, una situación que también va a llevar a adoptar medidas y restricciones en el territorio, y que se anunciarán mañana jueves.
En declaraciones a los periodistas, Fernández ha recordado que el Real Decreto que este miércoles ha entrado en vigor en toda España para poner fin a la obligatoriedad de las mascarillas en interiores salvo algunas excepciones, como el transporte público y los espacios sanitarios o sociosanitarios, también apela al uso responsable por parte de la ciudadanía.
A este respecto, el consejero ha considerado que, teniendo en cuenta que Asturias entró el pasado domingo en riesgo alto por los niveles de ocupación hospitalaria, un uso responsable debe ser el de mantener el uso de la mascarilla en todos los espacios interiores.
El consejero ha avanzado que el Principado ha acordado con el Ministerio de Sanidad la adopción de una serie de medidas y restricciones, de acuerdo a la nueva estrategia de vigilancia epidemiológica para los territorios que se sitúen en riesgo alto.
Estas medidas, que Salud detallará mañana, estarán relacionadas con las pruebas diagnósticas de infección activa (pruebas de diagnóstico) y con restricciones sociales y aislamientos de las personas positivas, ha avanzado Fernández.
Además, el Principado insistirá en la conveniencia de adelantar la segunda dosis de recuerdo de la vacuna contra la covid-19 para los mayores de 80 años y las personas institucionalizadas, es decir, usuarios de residencias sociosanitarias.
El consejero ha advertido de que la actual situación «puede afectar claramente a la actividad de los hospitales» y también a la «buena inercia» que llevaba el Servicio de Salud del Principado para reducir las listas de espera y paliar el impacto de la pandemia sobre el sistema sanitario en los dos últimos años.
Según el último balance hecho público ayer, martes, Asturias sumó la semana pasada, coincidiendo con la Semana Santa, 28 fallecidos por coronavirus, mientras que la cifra de hospitalizados aumentó de 247 a 333 personas, lo que elevó el nivel de riesgo de la comunidad de medio a alto por los indicadores asistenciales.
Además, el Servicio de Salud del Principado contabilizó a lo largo de la pasada semana 3.199 contagios, de los que 1.927 se produjeron entre mayores de 60 años.
Y es que la incidencia acumulada en este colectivo, considerado en la nueva estrategia con mayor vulnerabilidad ante la covid-19, roza los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que la evolución de la trasmisión en la última semana supera los 500 puntos, es decir en ambos indicadores se encuentra en riesgo «muy alto» de propagación.
La media de incidencia en España para los mayores de 60 años es de 505 a 14 días y de 256 a 7.
En cuanto a sus indicadores hospitalarios, tiene una ocupación del 9,3 % en planta (riesgo medio) y de 2,8 % en UCI, es decir normalizada, con 330 pacientes en total ingresados, 8 de ellos en las unidades críticas.
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