El incendio forestal declarado el pasado lunes en Ladrillar, en la comarca cacereña de Las Hurdes, avanza sin control y continua activo. Hasta ahora ha quedado más de 4.000 hectáreas sobre todo de la provincia de Cáceres.
Calificado como nivel 2 de peligrosidad, según ha informado la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio.
La noche ha transcurrido «relativamente tranquila», y la temperatura y el viento han permitido realizar un «buen trabajo» de coordinación y estabilización. Más de 150 efectivos han trabajado en la zona, entre maquinaria pesada, retenes terrestres, agentes del medio natural, medios nacionales y del Sepei.
La meteorología no ayuda y el fuego se propaga en zonas de difícil acceso. El dispositivo de la mañana relevaba a los compañeros que han tenido, según sus responsables, una noche «tranquila» sin ningún imprevisto.
Actualmente trabajan en la zona siete medios aéreos, que cuentan con el apoyo del Ministerio de Transición Ecológica y efectivos de Castilla y León. A su vez, sobre el terreno combaten contra las llamas nueve unidades terrestres, cinco agentes del medio natural, ocho técnicos y tres unidades de maquinaria pesada.
A esto se suma que, se ha procedido a cortar la carretera CC.55.3, de Casares de las Hurdes al límite provincial con Salamanca, la segunda en la zona, tras el corte ya establecido en la CC-158.