El politólogo socialista y presidente del CIS, José Félix Tezanos, escribe esta semana en la revista Temas sobre la “encrucijada político-preelectoral” en la que se encuentran los principales partidos de cara a las elecciones generales de finales de 2023. En su análisis, destaca al Partido Popular como la fuera “más asentada” en el lado derecho del tablero y la que más voto activado tiene tras las elecciones andaluzas del pasado mes de junio. Pero Tezanos no lo da todo por perdido para las opciones de Pedro Sánchez de revalidar un segundo mandato en La Moncloa. A su juicio, el PSOE aún tiene un 5% del electorado progresista sin activar de cara a las elecciones y con un potencial aún por demostrarse.
En su análisis, Tezanos destaca la “práctica desaparición” de Ciudadanos, “otra experiencia fallida del centro en España”, como una de las garantías “de la mayor rentabilidad práctica de sus votos” a favor del PP de Alberto Núñez Feijóo. Eso sumado al retorno al PP de muchos votantes de VOX afianza su punto de partido preelectoral. “La tendencia de buena parte del electorado de Vox puede ser la de volver a su redil, de donde procedían”.
Voto de derechas concentrado
“El balance general de todos estos hechos y movimientos ha sido un toque general a rebato para que todo el voto de la derecha y el centro-derecha se concentre en torno al PP de cara a las elecciones generales de finales de 2023”, destaca Tezanos. “De forma que los adelantos de convocatorias en Madrid, Castilla y León y Andalucía no han sido otra cosa que estrategias localizadas en territorios favorables –donde ya gobernaba el PP– para afianzar posiciones y demostrar fortalezas que pudieran presentar al PP como una “marca ganadora”, que es en lo que tienen interés determinados poderes fácticos”.
Esta estrategia tiene, a su juicio, puntos flacos, como el hecho de haber creado en Madrid un liderazgo alternativo como el de Isabel Díaz Ayuso, “tan potente como disfuncional”. “La radicalidad de Ayuso y su entorno, ni en el fondo ni en la forma, casa bien con la de otros líderes implicados en estos tanteos” como el presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla, asegura.
“De momento, después del subidón de Andalucía, los datos indican que el PP ha logrado activar prácticamente a todo su electorado potencial. Lo cual no significa, hoy por hoy, que eso le garantice una futura mayoría suficiente de escaños para formar gobierno. Algo que no va a resultar fácil para la derecha española, sin contar con otros apoyos” parlamentarios.
Desánimo en el voto de izquierdas
En el lado izquierdo del tablero, “el panorama preelectoral a medio plazo también es complejo”, aunque Tezanos asegura que las bases sociológicas potenciales superan en casi un tercio a las de la derecha. En este sentido, el presidente del CIS destaca que muchos votantes de izquierdas están en el pesimismo o derrotismo por la “estrategia de acoso estratégico anti-PSOE” desplegada por algunas estructuras de comunicación.
“Aunque la mayoría de los electores progresistas y de izquierdas no son tontos, ni se dejan manipular fácilmente, no puede negarse que las influencias de una estructura de comunicación tan sesgada como la española está logrando que una parte del electorado del PSOE se sitúe en un punto de arranque preelectoral un tanto distanciado, o incluso pasivo. Lo que se traduce, por ejemplo, en que en las encuestas rigurosas entre aquellos que no se definen electoralmente, en estos momentos en torno al 5%, digan que el PSOE es el partido con el que más simpatizan –aunque no le votarían ahora–, respecto a solo un 1% que refieren lo mismo del PP. Lo cual significa que el electorado del PP, después de Andalucía, está prácticamente movilizado en su totalidad. En tanto que en el PSOE en estos momentos hay un 5% de españoles que simpatizan con él, pero dicen que no le van a votar”, destaca.
“Lo mismo sucede –añade- con aquellos que consideran, por ejemplo, que el PSOE es el partido más cercano a sus ideas, que superan en más de cuatro puntos a los que mencionan al PP en este sentido, ocurriendo algo parecido en el caso de Podemos o de Izquierda Unida”.
Tezanos destaca también que las encuestas del CIS concluyen que los que prefieren presidentes de izquierdas (Pedro Sánchez y/o Yolanda Díaz) son cerca del 50% de la población decidida, mientras que los que se decantan por los tres principales líderes de la derecha (Núñez Feijóo, Santiago Abascal e Isabel Díaz Ayuso), se quedan en su conjunto en torno a 10 puntos por detrás.
El análisis de Tezanos concluye, en último término, con las opciones electorales de Podemos y Sumar, los espacios políticos a la izquierda del PSOE. Al respecto, augura que su complejidad y los debates internos en estas formaciones dificultan su correlación directa en votos y escaños. “Hay que entender que la complejidad sociológica y política que se da a la izquierda del PSOE va a tener no pocas dificultades teóricas y prácticas para lograr las sumas efectivas de votos y escaños que faciliten alcanzar representaciones parlamentarias más acordes con el peso que determinadas ideas y criterios tienen en el conjunto de la sociedad española”.