La mayoría de los productos que adquirimos los ciudadanos han subido como consecuencia del aumento generalizado de la inflación, debido al incremento de los precios de la energía por la guerra en Ucrania. Afortunadamente hay algunos artículos que se libran de esta escalada e incluso han visto reducido su coste para el consumidor.
Los datos del IPC que hemos conocido del mes de septiembre, que fue del 9%, revelan una cifra que no se veía desde hace casi 40 años, hace prever que la inflación seguirá siendo alta durante los próximos meses. Según el portal idealo.es, los frigoríficos y los colchones están un 30 % más baratos que antes de la invasión, causante de la espiral inflacionistas.
Podemos destacar el caso de las neveras, que cuando comenzó 2022 el precio medio era de 1440 euros, hoy están en los entornos de los 905 , o lo que es lo mismo, se ha reducido un 37 %. Lo mismo sucede con los colchones, cuyo precio lleva una trayectoria descendente en los últimos años. De hecho, en el mes de febrero su coste medio se situaba en los 304 euros, mientras que en el mes de agosto era de 215 , es decir un 34 % menos.
Asimismo, hay determinados juguetes que han visto reducido el desembolso que tiene que hacer el comprador, como son los de la marca de construcciones LEGO, con una bajada del 14% desde febrero. Playmobil, otra compañía conocida por los usuarios por sus piezas de construcción, también da alegrías para sus fieles seguidores, con una rebaja media del 7% en sus diferentes formatos.
El sector de la ropa y calzado reduce sus precios
La ropa y calzado reducen su precio de venta, ya que están de media un 9 % más baratos que antes que se iniciara la guerra en Ucrania. entre ellos la ropa de invierno. El estudio revela que los abrigos, tanto de hombre como de mujer, cuestan hoy un 9 % menos que a principios de 2022. Lo mismo sucede con los zapatos de invierno que se encuentra un 13 % más baratos.
Los productos que más suben
Por contra, hay productos que se han disparado de manera exponencial, sobre todo el gas que se ha encarecido un 71% desde la invasión, le sigue la cesta de la compra, en concreto los aceites que de media cuestan un 70% más, con especial incidencia en el de girasol, que ha duplicado su valor, por la escasez de la materia prima ya que procedía en gran medida de Ucrania. Las harinas y cereales siguen la misma estela con ascenso del 31%, pastas el 30% y otro bien básico como es la leche el 26%.
El hecho de que la mayoría de los productos se hayan encarecido tienen su origen en la subida de los precios de la energía, que han afectado a toda la cadena de valor. De momento no parece tener freno y todo dependerá de como evolucione el conflicto bélico. Estas circunstancias están generando que las familias españolas sean cada vez más pobres por la pérdida de poder adquisitivo.