La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (JUCIL) propone a los poco más de 8.500 guardias civiles que forman la Agrupación de Tráfico en España que aprovechen el largo puente que empieza este viernes para que sensibilicen a los conductores de la importante labor que llevan a cabo como encargados del control de las carreteras en España.
La invitación a que conciencien a los conductores antes que sancionarles se produce días después de saber que la Guardia Civil de Tráfico será expulsada de Navarra como consecuencia de la negociación mantenida por el Gobierno que preside Pedro Sánchez con los grupos políticos independentistas radicales vascos para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado.
Esta negociación con EH Bildu ha incluido la expulsión de la Guardia Civil de Tráfico de la comunidad autónoma de Navarra, donde estas competencias pasarán a la Policía Foral.
Más de una década de pérdida de efectivos y solo un guardia cada 140 kilómetros
La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha visto en la última década cómo disminuía el número de efectivos hasta el punto de que hoy en día sólo sería posible encontrar un guardia civil por cada 140 kilómetros de carreteras, autopistas y autovías nacionales, mientras que el parque de vehículos y los kilómetros de carreteras construidos aumenta paulatinamente. “Hay un déficit de más de dos mil agentes y nos podemos dar cuenta cuando realizamos un viaje por la carreteras españolas.
Hoy en día encontrarse con una patrulla de tráfico de la Guardia Civil es casi tan difícil como que te toque la lotería”, asegura el secretario de Comunicación de JUCIL, Agustín Leal. “Se ha perdido el espíritu con el que se creó precisamente la Agrupación de Tráfico, que era sobre todo el de ayuda y socorro de los conductores y de los acompañantes de los vehículos” añade Leal.
Y la pérdida de ese espíritu tiene consecuencias no solo para los guardias civiles, también para los ciudadanos, porque “ahora tiene más valor poner una denuncia que llevar a cabo un trabajo de auxilio en carretera, según consta en el Registro de Actividades Individuales (RAI) una perversa manera de obligar a los agentes a defender su sueldo” explica Agustín Leal.
“El RAI es el documento con el que se valora el rendimiento de los guardias civiles de Tráfico mes tras mes. Si eres de los cinco más altos de tu unidad obtienes una recompensa económica en forma de productividad. Sancionar solo lleva unos minutos, pero auxiliar puede llevar horas” argumenta el representante de la asociación profesional JUCIL.
Falta de materiales, de equipación y de prendas de abrigo
Se observa un abandono del Ejecutivo hacia la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, como por ejemplo, la grave carencia de material. “Sustituir un casco de motocicleta dañado o con defectos y desgastes por un uso intensivo puede tardar de media seis meses o la petición de prendas de abrigo, en un servicio donde estos materiales sufren mucho, puede demorarse hasta diez meses”, dice Agustín Leal.
A lo anterior se suma la existencia de turnos de trabajo extenuantes debido a la falta de personal. Turnos que pueden alcanzar en ocasiones las 16 horas en una jornada de 24 horas “el llamado doblete” explica Leal. “Este Gobierno parece empeñado en sacar a la Guardia Civil de Tráfico del territorio español, empezando en este caso por Navarra, de donde será expulsada el 31 de marzo próximo.
Mientras los altos mandos de la Guardia Civil miran para otro lado en JUCIL nos sumamos a la campaña de concienciación y sensibilización de la labor que llevan a cabo los agentes de tráfico”, anuncia el portavoz de JUCIL.
R.F