Este 23 de julio de 2023 ha tenido lugar las elecciones generales, cuyos resultados han sido celebrados por la izquierda. Sin embargo, no es una victoria holgada y son varios los obstáculos a los que se enfrenta Pedro Sánchez si quiere continuar gobernando unos años más. En consecuencia, no es en absoluto descabellado pensar en la posibilidad de una repetición electoral para diciembre de este año.
Alberto Núñez Feijóo ha tenido muy buenos resultados, pero no los suficientes como para alcanzar un gobierno junto con Vox y algún otro apoyo. A pesar de que el Partido Popular ha intentado negociar con el PNV, estos les han rechazado. Por otro lado, el PP también ha intentado acercarse al Partido Socialista para llegar a un acuerdo. No obstante, los socialistas tampoco parecen estar por la labor; algo que encaja con la postura del PSOE en campaña al considerar como socio principal a Sumar y reforzando la existencia de dos bloques existentes divididos por ideología -entendido como un clivaje entre izquierdas y derechas- y por nacionalismo. Algo que se deja igualmente ver por el rechazo de los conservadores vascos a los populares.
El PSOE ha conseguido aumentar sus escaños e ir contra todo pronóstico, ya que las encuestas no eran favorables. Por tanto, la movilización de la izquierda se ha dado probablemente durante la última semana del día de las elecciones generales. La estrategia de adelantar las elecciones para que coincida con los acuerdos de gobierno entre PP y Vox en las autonómicas y municipales ha funcionado.
Tanto Sánchez como Yolanda Díaz se muestran confiados en que llegarán a formar gobierno sin repetir elecciones. No obstante, la situación es muy compleja.
¿Qué pide Junts per Catalunya para darle el gobierno a Pedro Sánchez?
De momento, el contexto pinta mejor para el PSOE porque solo el bloque progresista tiene alguna oportunidad de gobernar. No obstante, necesitan el apoyo de Junts per Catalunya. Y, por ahora, sus exigencias están siendo maximalistas como la amnistía o un referéndum en Cataluña, algo imposible por estar fuera de la Constitución. Tampoco sería posible modificar la Constitución.
Este es el principal obstáculo de Sánchez y que puede provocar que vayamos a unas nuevas elecciones generales en diciembre.
Cabe esperar que las exigencias de Junts vayan a menos en los próximos días. Aunque habrá que esperar para saber si esto es así, y si no es así, no quedará otra que una repetición electoral por la imposibilidad de formar gobierno. En definitiva, España está ante un empate técnico.
Sumar está de celebración, aunque sus resultados en estas elecciones generales tampoco hayan sido positivos
Tras conocerse los resultados de las elecciones generales, la líder de Sumar valoró positivamente los resultados electorales. El objetivo de parar a la derecha y a la extrema derecha había sido conseguido.
No obstante, Sumar ha perdido muchos votos y escaños en comparación con Unidas Podemos en 2019. A pesar de haber unido a la izquierda con un total de 16 proyectos políticos en una sola confluencia. Por ese motivo, Díaz ha sido duramente criticada por Ione Belarra, secretaria general de Podemos. La formación morada cree que se debe por el veto a Irene Montero y por alejarse del feminismo.
Aunque si se compara los datos de Sumar con los de las recientes elecciones autonómicas y municipales, los resultados de Díaz no salen tan mal parados. Sin embargo, igualmente los resultados son negativos, especialmente porque tampoco alcanzan los escaños que les daban algunas encuestas y porque no ha habido sorpasso a Vox. Esto último era importante para consolidarse como la tercera fuerza política.
El desplome de Vox y el fortalecimiento del bipartidismo en estas elecciones generales
La caída de la tercera fuerza política representa un evidente fortalecimiento del bipartidismo. Vox ha sido castigado y solo ha obtenido 33 escaños, perdiendo 19 diputados.
Cabe mencionar que tanto el PSOE como el PP han sido claramente beneficiados por el «voto útil». Y ambos marcan una amplia distancia con la tercera fuerza.
El PP ha conseguido más de ocho millones de votos y el PSOE 7’7 millones. Estas cifras representan el 60% de los votos. En comparación con anteriores elecciones generales, se puede afirmar que el bipartidismo ha salido reforzado.
Los independentistas son la llave del gobierno, a pesar de que también han sido castigados electoralmente
A excepción de EH Bildu, el resto de partidos independentistas han perdido escaños en las elecciones generales del 23-J. Esquerra Republicana ha bajado seis y Junts y el PNV uno.
En Cataluña, ERC ya no es la formación más votada; situándose estos por debajo del PSC y empatado con Sumar.