Ha vuelto a quedar demostrado que los formularios que presentan los diputados y senadores sobre sus declaraciones de bienes y rentas son documentos carentes de garantía o validez jurídica, que nadie fiscaliza. No hay responsable alguno que revise y compruebe si hay datos erróneos, como, por ejemplo, reflejar cantidades brutas cuando solo hay que poner “percepciones netas”. El jueves pasado, el Boletín Oficial de las Cortes Generales publicó la declaración de bienes y rentas de 189 diputados, pero solo de aquellos que perdieron “su condición de tales como consecuencia de la disolución de la XIV Legislatura. Debe entenderse que aquellos que no hayan presentado declaración final, sus bienes y rentas no habrán experimentado variación sobre las declaraciones ya presentadas y publicadas en el Boletín Oficial de las Cortes Generales”.
Estrella Digital se ha centrado en los datos del que fuera vicepresidente primero del Gobierno durante la primera parte de la legislatura y diputado por Unidas Podemos, Pablo Iglesias. Y lo hacemos por sus constantes polémicas a cuenta del inmueble que se compró en la localidad madrileña de Galapagar junto con su pareja sentimental, IreneMontero, que es la actual ministra de Igualdad en funciones y diputada de la Cámara Baja. Entre los dos solicitaron un préstamo hipotecario de 540.000 euros en mayo de 2018. En plena campaña electoral del 28M, Montero explicó a una ciudadana en plena calle y ante los micrófonos de la televisión que estaba costeando parte de ese gasto gracias a una herencia tras el fallecimiento de su padre. Eso y también a los sueldos públicos de los dos.
Resulta que, en sus declaraciones de bienes y rentas, cada una con una fecha diferente de firma, 31 de marzo de 2021 él, y 19 de noviembre de 2019 ella, aparece que deben la misma cantidad de la hipoteca. Les concedieron 540.000 euros, pero en los dos documentos, con diferente fecha, aparece que el banco les reclama 467.657 euros. Es decir, desde que Montero presentó el documento hasta que lo hizo su pareja ¿no han abonado letra alguna para pagar el chalet? Fuentes del Congreso reconocieron a Sueldos Públicos hace años que nadie revisa esos documentos. Se presupone la buena fe de sus señorías. ¿Estamos ante un error involuntario, dejadez o falta de transparencia? ¿Han tenido el privilegio de no pagar la hipoteca durante 16 meses y medio?
Hace más de dos años, en mayo de 2021, Iglesias dejó sus cargos políticos en el Consejo de Ministros, ministro y vicepresidente primero, renunció a su escaño en el Congreso de los Diputados y también abandonó la primera línea de la formación ‘morada’. Volvió a sus actividades docentes y también privadas en los medios de comunicación. En ese año, su remuneración estaba fijada en 79.746 euros divididos en 12 pagas de 6.645 euros.
Por su parte, Montero sigue cobrando la nómina de ministra, ahora en funciones, con menos competencias y carga de trabajo que no se reflejan en una merma en sus ingresos de 6.618 euros brutos al mes. Su sueldo público asignado para 2023 es de 79.415 euros, sin derecho a pagas extra ni complementos de productividad, según el BOE. En 2022 percibió 77.478 euros; en 2021, 74.858 euros; y el 2020, 72.443 euros (asumió el cargo el 13 de enero), tal y como viene reflejado en el Portal de la Transparencia de la Administración General del Estado. Por lo tanto, y siempre a partir de las cifras oficiales publicadas, Montero ha cobrado, con fecha de 31 de julio de 2023, más de 271.000 euros como ministra de Igualdad del Gobierno de España. No es funcionaria y, por lo tanto, no percibe trienios de antigüedad.
Por otra parte, como diputada por Madrid en el Congreso de los Diputados, todavía en el cargo, tiene derecho a percibir la indemnización exenta de tributación que durante los últimos años ha rozado los 1.000 euros mensuales, 14 pagas anuales. Actualmente son 958 euros y el año pasado eran unos 935 euros. Hasta que Iglesias dejó la vicepresidencia del Gobierno, entre los dos sumaban unos ingresos públicos que superaban los 13.000 euros brutos y unos 1.800 libres de impuestos.
Además, el régimen interno de Unidas Podemos le obliga a donar una parte de su sueldo al partido. Hace tres años, varios medios de comunicación publicaron que debían donar entre un 15 y un 35% de su sueldo neto. Sin embargo, en 2021, Newtral volvió a preguntar por esta cuestión al partido ‘morado’ sin respuesta ya que la formación seguía sin concretar los porcentajes. Cabe recordar que, durante los primeros años de andadura de Podemos, los cargos electos cobraban solo tres veces el Salario Mínimo Interprofesional, su portal de transparencia era de los más completos de España, con información detallada sobre los gastos de cada diputado, una copia de la nómina, las donaciones al partido y a otros entes de carácter social. Sin embargo, poco a poco, toda esa información quedó desfasada, incluso durante meses seguía apareciendo la foto de Íñigo Errejón como diputado del grupo parlamentario, cuando era evidente que había roto relaciones con Pablo Iglesias y se había refugiado en Más Madrid.
Según el documento publicado la semana pasada en el Boletín Oficial de las Cortes Generales, que lleva fecha de 24 de julio de este año, Iglesias obtuvo 46.460 euros de percepciones netas por sus “actividades económicas” y pagó 31.291 euros de IRPF. También declara una vivienda en Madrid, al 50% comprada en 2018 y otra en Ávila, de 2013, antes de comenzar su carrera política. Reconoce disponer de 6.541 euros en sus cuentas corrientes. En 2012 se compró una motocicleta y en 2019 un vehículo turismo, aunque no detalle los modelos, como sí hace la mayoría de diputados. El dato clave es el del préstamo hipotecario al 50%. Le concedieron 540.000 euros en 2018 para hacer frente a la compra del chalet de Galapagar en el que convive con Montero y sus hijos. Su saldo pendiente es de 467.657 euros. Nos queda la duda de que el documento lleva su firma con fecha de 31 de marzo de 2021.
Por su parte, Montero, declaró un salario de diputada de 79.025 euros en su declaración, correspondiente al ejercicio de 2018. Como decenas de señorías, Montero se equivoca porque no debe reflejar esos ingresos tal y como señala el pie de página del formulario: “se excluirán las percepciones recibidas del Congreso o Senado, que se encuentran ya publicadas en la web de las Cámaras”. Pagó 24.508 euros de IRPF. Hace casi cuatro años reconoció ahorros en tres cuentas bancarias: 54.261 euros de una personal; 75.388 euros de fondos procedentes de una herencia; y 6.541 euros de una cuenta compartida al 50%. Al igual que Iglesias, reflejó el préstamo hipotecario de la Caja de Ingenieros al 50% concedido en mayo de 2018 por un importe de 540.000 euros y con un saldo pendiente de 467.657 euros.
Declaración de bienes de Irene Montero 2019
Carles Torrijos
Fundador y director de Sueldos Públicos