Este lunes, el rey arranca la novena ronda de consultas para determinar la futura Presidencia del Gobierno. Aunque Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, y Pedro Sánchez, líder del PSOE, se posicionan como los principales aspirantes, ninguno tiene aún garantizado un apoyo mayoritario en el panorama parlamentario.
La recién inaugurada XV legislatura, que comenzó con la constitución de las Cortes, sigue rodeada de interrogantes, derivados del escenario postelectoral del 23 de julio. Todos los ojos se dirigen a La Zarzuela, donde se llevarán a cabo las discusiones con representantes de siete formaciones durante dos días intensos.
Las formaciones presentes serán el Partido Popular (PP), el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Vox, Sumar, PNV, Unión del Pueblo Navarro (UPN) y Coalición Canaria (CC). Cabe destacar que Yolanda Díaz será la portavoz única de Sumar, que agrupa a ocho partidos.
Sin embargo, otras fuerzas políticas como Esquerra Republica (ERC), Junts per Catalunya, EH Bildu y Bloque Nacionalista Galego (BNG) han decidido no participar, reafirmando su posición crítica con la monarquía y, en el caso específico de los partidos catalanes, su boicot persistente desde 2017.
Conforme al orden estipulado, basado en los resultados electorales, las consultas se iniciarán con Javier Esparza, líder de UPN, seguido por representantes de otras formaciones y culminando con las conversaciones con Vox, PSOE y PP a lo largo del martes.
Al culminar estas consultas, el rey convocará nuevamente a Francina Armengol, presidenta del Congreso, para anunciar su decisión. El debate formal de investidura se prevé para después del 28 de agosto.
Es importante recordar que, según la Constitución, no es obligatorio que el ganador de las elecciones sea el candidato a presidente. Se busca, en esencia, alguien que cuente con la confianza del Congreso.
Históricamente, hubo un caso en 2016 donde el vencedor electoral, Mariano Rajoy, declinó ser candidato, lo que derivó en una segunda ronda de consultas, cediendo el turno a Pedro Sánchez, aunque no llegó a ser investido.
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