El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha pronunciado este sábado en Málaga en el inicio del año político del PSOE sobre el reciente episodio que involucró a Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Refiriéndose a la conducta de Rubiales, Sánchez expresó: «No podemos aceptar representantes nacionales que nos avergüencen con sus comportamientos y declaraciones».
Pese al revuelo causado por el incidente, Sánchez se mostró optimista, argumentando que lo ocurrido no ha manchado la imagen de España a nivel internacional. Para él, la verdadera «marca España» es el comportamiento ejemplar de las futbolistas, quienes, junto con la sociedad española, han adoptado el lema «se acabó» en respuesta a la actitud de Rubiales durante la ceremonia de celebración del Mundial Femenino de Fútbol.
La polémica cobró mayor relevancia después de que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) catalogara como «grave» la acción de Rubiales al besar sin permiso a la jugadora Jenni Hermoso. Esta calificación podría resultar en sanciones que varían desde multas hasta una posible inhabilitación de dos años.
Sánchez elogió a las jugadoras de fútbol, afirmando que «triunfaron en dos frentes: en el terreno de juego y al mostrar al mundo un ejemplo de igualdad de género». En este contexto, también aplaudió el impulso feminista y la lucha por la igualdad, destacando la participación de muchos hombres comprometidos en este movimiento. Sin embargo, admitió que aún queda mucho camino por recorrer, como lo evidencian incidentes desafortunados como el protagonizado por Rubiales.