Santiago Abascal, el líder de Vox, ha declarado su respaldo a Alberto Núñez Feijóo, el líder del Partido Popular (PP), de cara a la investidura para la presidencia del Gobierno. Abascal ha expresado su deseo de establecer una «colaboración sin remilgos ni complejos» con el objetivo de «recuperar la normalidad democrática» y contrarrestar al «separatismo golpista» y su «cómplice en La Moncloa», en referencia al actual Gobierno.
Abascal ha aprovechado este escenario para evidenciar las carencias del que considera el “peor gobierno de la historia de España”, cuestionando la gestión actual y resaltando la fallida investidura de Feijóo, quien, a pesar del apoyo de distintos partidos, aún necesita cuatro votos para alcanzar la mayoría absoluta.
Este respaldo llega en un contexto de renovación y reconciliación entre Vox y PP, dos fuerzas que han evidenciado discrepancias en sus posturas, pero que actualmente gobiernan juntas en cinco regiones y numerosos municipios. Abascal ha modulado su tono crítico hacia el PP, tras reuniones donde ambos líderes acordaron iniciar «una nueva etapa de colaboración».
El presidente de Vox ha elogiado la disposición de Feijóo para acoger las demandas de su partido, entre ellas, compromisos claros para «defender la igualdad de los españoles» y «recuperar la neutralidad de las instituciones», que Abascal considera han sido “secuestradas por la mayoría socialista”, y el rechazo a cooperar con quienes buscan un «apartheid» hacia los votantes de Vox.
Sin embargo, Abascal también señaló la falta de apoyo de Feijóo a sus mociones de censura contra Pedro Sánchez y criticó las razones esgrimidas por el PP para abstenerse en diferentes oportunidades. Abascal manifestó que su partido no es un adversario del PP, subrayando la necesidad de unir fuerzas para contrarrestar a quienes, según su perspectiva, están conduciendo a la nación a un “callejón sin salida”.
Abascal ha sido crítico, además, con Pedro Sánchez y los partidos independentistas, acusándolos de llevar a España hacia un futuro incierto y de “chantajear” al país. Ha advertido a los separatistas sobre sus intentos de destruir la nación, incluso con aliados en la Moncloa.
Feijóo, por su parte, ha agradecido el apoyo sin condiciones de Vox, reconociendo las “diferencias notorias” entre ambas formaciones. El líder del PP también destacó la división y fragmentación del centro-derecha español, sugiriendo que esta situación ha beneficiado al PSOE, y reafirmó su compromiso de mantener el diálogo con Vox y otros partidos.
Este acercamiento y compromiso mutuo entre Vox y el PP resalta la compleja dinámica política en España, mostrando un panorama donde la colaboración y el diálogo entre diferentes fuerzas políticas se vuelven esenciales para la conformación de un gobierno estable y representativo.
El apoyo de Abascal a Feijóo simboliza no solo un cambio de tono y relación entre Vox y el PP, sino también un claro indicativo de la reconfiguración política que estos partidos buscan en España, para “recuperar la normalidad democrática”.