Este martes, el Senado ha respaldado la postura del PP de oposición a «una amnistía expresa o velada», haciendo hincapié en «la urgente necesidad» de alcanzar «acuerdos de Estado». Esta moción, impulsada por el Partido Popular (PP) y aprobada con 139 votos procedentes del PP, Vox y UPN, refleja una resistencia al otorgamiento de indultos y beneficios judiciales en el contexto político actual.
El texto de la moción solicita al Gobierno en funciones que proteja firmemente los principios consagrados en la Constitución y, a su vez, hace hincapié en recuperar la política de consensos entre las fuerzas políticas predominantes a nivel nacional. Estos acuerdos tienen como propósito garantizar la igualdad de derechos para todos los ciudadanos y subrayar la preeminencia de la ley.
La propuesta del PP surge en un momento político crucial, cuando Francina Armengol, presidenta del Congreso, ha informado que el rey Felipe VI ha designado a Pedro Sánchez para conformar un nuevo Gobierno. En este escenario, destacadas voces del PP, como el senador Antonio Silván, han mostrado su preocupación sobre las posibles influencias y decisiones del expresidente del Govern catalán, Carles Puigdemont, en este proceso de investidura.
Silván, durante su intervención, criticó la posibilidad de que, en medio de las negociaciones, se promueva una ley de amnistía, pues ello, a su juicio, deslegitima al Estado, representando «un fraude a los ciudadanos y un ataque al Estado de Derecho».
Sin embargo, desde el partido socialista, hubo voces disidentes. Eva Granados, portavoz del PSOE, desestimó la moción del PP como obsoleta, sosteniendo que refleja una visión desconectada de la «España de 2023». Granados destacó que su partido apuesta por el diálogo y respeta la Constitución como marco central de toda discusión. Además, hizo un llamamiento al PP para que no utilice el Senado para «autovotarse», considerando que tal maniobra solo demuestra «la causa del fracaso de Feijóo».
En la misma línea, la portavoz de ERC, Sara Bailac, tildó la moción como un intento de prolongar «la agonía de la investidura fallida de Feijóo». Asimismo, Josep Lluis Cleries, senador de Junts, describió la iniciativa como una «moción de perdedores», destacando la necesidad de un «pacto histórico» que reconozca a Cataluña como nación.