Este viernes, la línea de alta velocidad entre Madrid y Levante experimentó graves interrupciones debido a una avería en la infraestructura cerca de Monteagudo de las Salinas, en la provincia de Cuenca. Se estima que al menos 5.000 pasajeros de diferentes operadores, incluidos Renfe, Iryo y Ouigo, se han visto afectados por esta situación.
A raíz de la incidencia, cuatro trenes con un total de 477 pasajeros se detuvieron abruptamente en el tramo mencionado. Las rutas afectadas incluyen servicios de Madrid a Valencia, Murcia y Alicante, en ambas direcciones. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) confirmó el problema a través de su cuenta en la red social X, señalando que los retrasos se deben a la mencionada incidencia en Monteagudo.
En un intento por gestionar la crisis, algunas compañías en la estación Madrid-Chamartín informaron a sus pasajeros que es poco probable que se restablezca la normalidad en la circulación durante el día. Se sugiere a los afectados que consideren reprogramar o cambiar sus billetes.
Mientras, ADIF ha suspendido la circulación en esta línea de alta velocidad para el resto del día y se encuentra trabajando activamente para resolver el problema. Las empresas operadoras están ofreciendo reembolsos de billetes y buscando soluciones de transporte alternativo para sus pasajeros.
Los pasajeros que se encontraron detenidos en Monteagudo de las Salinas ya han sido evacuados. Fueron trasladados a la estación Fernando Zóbel en Cuenca, un proceso sin incidentes. Los equipos de emergencia y Protección Civil ofrecieron asistencia y suministros, aunque, afortunadamente, no hubo necesidad de intervenciones médicas.
Ouigo, uno de los operadores afectados, confirmó que un tren con 477 pasajeros que había salido de Valencia-Joaquín Sorolla se detuvo debido a la incidencia. Como respuesta, la compañía ofrecerá generosas compensaciones, incluido un reembolso del 300% del valor del billete a los pasajeros afectados, describiendo el extra 200% como un «gesto» de buena voluntad.
Se ha identificado la causa raíz de la interrupción como un fallo en la catenaria, lo que llevó a una falta de tensión en la vía. Las primeras señales de problemas surgieron alrededor de las 8:20 horas cuando un tren Alicante-Ourense se vio forzado a cambiar de vía. Otros trenes, incluido uno de Ouigo y otro de Renfe, se detuvieron o tuvieron que retroceder debido a la misma razón.
La empresa Iryo reportó 12 trenes afectados: 10 no pudieron partir y dos se detuvieron en pleno recorrido. Están facilitando autobuses para ayudar en la evacuación de los pasajeros.
Se espera que la circulación de trenes entre Madrid, Valencia y Alicante se reanude mañana. Hasta entonces, los viajeros deben estar preparados para afrontar retrasos y buscar alternativas si es necesario.