En un acto celebrado este domingo en Toledo, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha lanzado una advertencia sobre las consecuencias que traería una posible ley de amnistía promovida por los partidos independentistas. Esta medida, que busca el apoyo de la investidura de Pedro Sánchez, marcaría, según Feijóo, el «punto y final» de la trayectoria del líder socialista. Además, ha vaticinado que, si Sánchez logra establecer un gobierno bajo estas condiciones, será uno que «nacerá roto».
En su discurso, centrado en defender la igualdad entre los españoles, Feijóo argumentó que aunque «quizá Sánchez pueda formar un gobierno», sería «un presidente dimitido» desde su inicio. La razón detrás de esta afirmación es que, para el líder del PP, Sánchez estaría faltando a su «principal deber, que es velar por la igualdad de todos los españoles».
Revisando los resultados de las elecciones del 23 de julio, Feijóo destacó que el Partido Popular salió victorioso en número de votos. En este contexto, acusó a los socialistas de «intentar ocultar que habían perdido» y aseguró que las voces de «once millones de españoles» que respaldan al PP no serán silenciadas en el Parlamento.
El dirigente del PP lanzó un desafío a Sánchez: reconsiderar su postura y abrir el camino para nuevas elecciones el 14 de enero. La motivación sería dar la oportunidad de decidir sobre «la independencia, la amnistía y la desigualdad». Feijóo señaló que dentro del PSOE hay quienes dudan sobre la dirección actual del partido y predijo que «algún día el PSOE mirará hacia atrás y verá que le avergüenza todo esto».
En cuanto a la política internacional, el presidente del PP cuestionó posturas dentro del Ejecutivo en funciones, específicamente las «equidistantes, ambiguas e incluso condescendientes» con respecto a «los actos terroristas en Oriente Medio». Esta crítica iba dirigida hacia Ione Belarra, líder de Podemos, quien pidió sanciones y la suspensión de relaciones con Israel.
Feijóo, al cuestionar la motivación del Gobierno de coalición para mantenerse en el poder «a cualquier precio», sugirió que la razón podría encontrarse en el «ego de una persona que no sabría qué hacer si no es presidente del Gobierno después de perder unas elecciones», indicando además que «Pedro Sánchez sólo se quiere a sí mismo».
Finalmente, el líder de los ‘populares’ hizo hincapié en la diferencia de actividad entre el Congreso y el Senado, donde el PP ostenta la mayoría. «Claro que vamos a abrir el Senado», afirmó, insinuando futuros movimientos políticos para fortalecer la postura del partido sobre la igualdad y unidad nacional.
En dicho acto, en el que se congregaron cerca de dos mil personas, otros líderes políticos como el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, y el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, compartieron también sus perspectivas ante la multitud que les acompañaba.