Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno en funciones, abogó este sábado por la amnistía de los líderes del ‘procés’ en Cataluña, motivado por el «interés de España».
Durante su discurso, Sánchez afirmó: «En el nombre de España, en el interés de España, en defensa de la convivencia entre españoles, defendiendo hoy la amnistía en Cataluña por los hechos acaecidos en la década pasada».
En palabras del presidente: «sabíamos que la superación definitiva del conflicto requería otras medidas de gracia en el futuro, porque no se podía dejar abierta esa herida indefinidamente».
Destacó que 56 diputados exigen la amnistía como requisito para formar un «gobierno de progreso» y evitar una administración dominada por la derecha y ultraderecha, destacando la necesidad de la amnistía para evitar una repetición electoral, señalando que es la «única vía posible para que haya Gobierno en España».
Durante la reunión del Comité Federal del PSOE celebrada este sábado, se aprobó una consulta para las bases del partido, buscando su apoyo en pactos con diferentes grupos parlamentarios, como Junts y ERC.
Aunque la decisión ha sido bien recibida por muchos miembros del partido, Sánchez admitió que podría ser polémica. Recordó, sin embargo, que la amnistía ha sido implementada en otras naciones europeas consolidadas democráticamente, como Alemania, Reino Unido y Portugal.
La voz disonante más destacada fue la del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien no ocultó su desaprobación. Según fuentes cercanas, García-Page subrayó la importancia de no ceder ante las demandas independentistas.
La consulta a la militancia del PSOE sobre el pacto gubernamental es vinculante y se llevará a cabo tanto telemáticamente como presencialmente en los próximos días, cuyos resultados se esperan para el 5 de noviembre.
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