El director general de la Guardia Civil, Leonardo Marcos, ha emitido la orden de abrir expedientes por «falta muy grave» y proceder a la «suspensión cautelar de tres meses» a dos miembros de la institución pertenecientes a la Asociación Pro-Guardia Civil (APROGC) y a otro de Justicia Guardia Civil (JUCIL). Esta medida se toma en respuesta a las manifestaciones críticas de los agentes contra la ley de amnistía acordada por el PSOE con Junts y ERC.
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En detalle, la Guardia Civil ha iniciado los expedientes a un sargento primero y un guardia civil, ambos miembros de APROGC, por un comunicado en el que expresaron su oposición a la amnistía, haciendo referencia a su juramento como militares para «derramar sangre» en defensa de España y la Constitución.
En el tercer caso, la Benemérita ha expedientado a un guardia de la asociación JUCIL por criticar la «felonía» que, según él, suponía que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, respaldara la amnistía ante el Comité Federal del PSOE. La orden del director general incluye la «medida cautelar de apartarles del servicio de manera inmediata y por un plazo de tres meses mientras se resuelve el expediente«.
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El pasado viernes, Leonardo Marcos ordenó una investigación para identificar a los responsables de APROGC y abrir un procedimiento disciplinario por el comunicado en el que expresaron su «profunda preocupación» por el pacto entre el PSOE y partidos independentistas catalanes sobre la ley de amnistía. En dicho comunicado, reafirman su juramento «ante la Bandera como militares«, mostrándose «dispuestos a derramar hasta la última gota de sangre en defensa de la soberanía e independencia de España y de su ordenamiento constitucional».
El 29 de octubre, la Guardia Civil también anunció que estaba estudiando posibles consecuencias disciplinarias y legales contra otra asociación, Jucil, por «quebrantar el principio de neutralidad política» al criticar la posición de Pedro Sánchez sobre la amnistía ante el Comité Federal del PSOE.