El pasado 22 de noviembre se publicó el documento de FEDEA (Fundación de Estudios de Economía Aplicada) llamado «El contenido económico de los pactos de investidura«, firmado por el economista Ángel de la Fuente, director ejecutivo de la fundación. En ella se detallan diferentes aspectos del pacto alcanzado entre el Partido Socialista y Esquerra Republicana (ERC), uno de los acuerdos que han permitido al PSOE de Pedro Sánchez alcanzar la mayoría absoluta y revalidarse al frente del Ejecutivo en esta nueva legislatura. Asimismo, hay datos interesantes relevantes a la condonación de la deuda y lo que implica para Andalucía y otras comunidades autónomas.
Anunciado a principios de noviembre, este acuerdo fue polémico por la condonación de un 20% de la deuda de Cataluña, comunidad autónoma sobre la que pesaba la deuda al estado español más alta de todo el territorio fruto de la gestión de los últimos años. Esta condonación suponía una cantidad de 15.000 millones de euros, la cual también han demandado otros territorios y presidentes autonómicos. Entre ellos el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, respaldado por el resto de miembros del PP Andalucía, naturalmente opuestos al PSOE de Sánchez siempre que sea posible.
Como se explica en dicho documento, el acuerdo de coalición firmado entre PSOE y Sumar – que ha llevado a que haya hasta cinco ministerios en manos de la conjunción de partidos progresistas que compone el Movimiento Sumar – compromete al actual Gobierno de Sánchez a impulsar una muy esperada reforma del sistema de financiación de las comunidades autónomas de régimen común (SFRC). Esta lleva pendiente por ejecutarse desde la pasada década – en concreto desde los tiempos en los que Zapatero era presidente del Gobierno. Esto tiene como objetivo que cada comunidad autónoma tenga recursos suficientes para prestar servicios públicos de calidad y que estos servicios estén se garanticen con igualdad de acceso para todos los ciudadanos.
Ahora bien, los propios acuerdos que ha realizado el PSOE con los partidos catalanes independentistas, así como con PNV, pone en serio riesgo esta igualdad entre ciudadanos. Junts ha exigido que se ceda a Cataluña el 100% de los tributos estatales recaudados allí – esto no está en el acuerdo entre PSOE y Junts sino que es una reivindicación de los de Carles Puigdemont. Lo que sí ha aceptado el PSOE es el riesgo a que tanto ERC y Junts tengan el lujo de reescribir la narrativa del procés así como su postura con respecto al sistema actual.
Dicho de otro modo, estos acuerdos ponen en riesgo que la aportación de los ciudadanos catalanes y vascos sea menor al del resto de los españoles, rompiendo la igualdad de los ciudadanos en el sentido tributario. En lo que respecta a la deuda autonómica, esos 15.000 millones de euros de quita de deuda procedente del acuerdo del PSOE con ERC es equivalente a unos 1.980 euros de condonación por cada habitante según el censo de Cataluña de 2021. De extenderse la medida a otros territorios, lo lógico sería que se perdonase a cada comunidad autónoma esa misma cantidad por habitante.
El acuerdo entre PSOE y ERC le costaría al Estado casi 88.000 millones de euros
Esto le costaría al Estado un total de 88.000 millones de euros (87.798 millones en concreto) si lo mantiene igual para todos los territorios del país. Una decisión que ya ha sido criticada por el gobernador del Banco de España Pablo Hernández de Cos. Este considera que esta decisión es un simple parche que evidencia el problema que sufre el sistema de financiación autonómica, llevando a que esos desequilibrios fiscales entre comunidades autónomas no sean fruto de mejores o peores gestiones sino indicadores de insuficiencias de recursos.
Hernández de Cos también ha hablado de la necesidad de que existan mecanismos que generen incentivos para aquellas gestiones de comunidades autónomas que lleven a cabo comportamientos prudentes. Esto es algo en lo que coincide de la Fuente en su documento, alegando que pueden percibir el hecho de que pueden gastar más de lo que ingresan, sabiendo que tienen la tranquilidad de contar con un Estado que las rescatará de manera incondicional. Tal es el precedente que sienta este acuerdo del PSOE con ERC.
«La condonación incondicionada de deuda recogida en el acuerdo con ERC es una pésima idea porque agravará los serios problemas de incentivos que ya sufre el SFRC. A la vista de la experiencia previa, cualquier quita no sujeta a condiciones estrictas de ajuste tenderá a confirmar la percepción que ya tienen las CCAA de que pueden gastar sistemáticamente más de lo que ingresan porque al final el Estado las rescatará de una forma u otra sin coste alguno para ellas y constituye, por tanto, una invitación a la indisciplina fiscal«, se puede leer en dicho texto.
«Pero es que, además, esta parte del Acuerdo viene a ser un seguro gratuito contra el riesgo cíclico a la baja que eliminará cualquier tentación que pudieran tener las comunidades de ahorrar algo para los malos tiempos e incrementará también el gasto del Estado. Puestos a incentivar la irresponsabilidad fiscal, el acuerdo es difícilmente superable«, explica el economista gijonés.
Repercusiones para Andalucía
Pese a las continuas quejas del PP Andalucía de Moreno, si esta condonación se aplica a todas las comunidades autónomas incluyendo a Andalucía, estos se quedarían aliviados de buena parte de esa carga de deuda. En el caso de Andalucía tienen una deuda de 38.018 millones de euros, de los cuales 25.409 millones son con el Estado. Esta deuda comenzó a crecer de manera descontrolada en los años posteriores a la Gran Recesión, sobre todo de 2012 en adelante – coincidiendo con el final de José Antonio Griñán al frente de la Junta de Andalucía y el descubrimiento del caso ERE en Andalucía, aunque el PSOE aguantó al frente de la Junta hasta las autonómicas de 2019.
De aplicarse la misma condonación por habitante que con Cataluña a 1.980 euros, Andalucía recibiría una condonación de 16.437 millones de euros. Porcentualmente, sería en torno a un 40% de deuda total, además de suponer casi un 65% de la deuda con el Estado. En comparación, en el caso de Madrid serían 12.927 millones de euros (aunque Madrid, al igual que Navarra y el País Vasco, no tienen deuda con el Estado). A Valencia se le condonarían 9.750 millones, porcentualmente similar a Cataluña dado que su deuda es de 48.344 millones.
En el caso de Galicia, Canarias y Castilla y León, esta condonación supondría recibir más millones que la deuda que tienen contraída con el Estado. De todas ellas Cataluña era la más beneficiada proporcionalmente dado que arrastra una deuda de 86.800 millones, de los cuales 73.110 millones son con el Estado.
Lo que no se explica en ningún momento es cómo afectaría a los diferentes ayuntamientos esta condonación de la deuda – no hay que olvidar que hay varios ayuntamientos andaluces con problemas de sostenibilidad económica, como son el caso de Jaén o Jerez de la Frontera, este afrontando una deuda de 1.126 millones de euros. Aunque en los últimos años del gobierno de Mamen Sánchez (PSOE) en la localidad gaditana generaron superávit, dejó el puesto de alcaldesa con una deuda que no paró de crecer desde que asumió el mando en 2015.
Situaciones similares viven otros ayuntamientos andaluces como Arcos de la Frontera, Algeciras, Almonte, La Línea de la Concepción, Los Palacios y Villafranca o Puerto Real, además de otros ayuntamientos de otras partes de España. Lo que queda claro, como afirma de la Puente, es que «lo que no tiene sentido es fijar reglas simplistas y difícilmente generalizables para el reparto de la inversión estatal entre las CCAA«. Por ende, el PSOE ahora necesita una solución largoplacista para este problema de financiación.