El Partido Popular (PP) ha lanzado duras críticas al gobierno socialista, acusándolo de «humillarse» a sí mismo y a la democracia. Este reproche viene tras la «nueva cesión» del PSOE a Junts en el marco de las enmiendas a la ley de amnistía, específicamente en lo que respecta a los delitos de terrorismo.
Según el PP, el PSOE está ahora aceptando propuestas que había rechazado vehementemente hace solo cuatro días, calificándolas de «línea roja infranqueable».
Por su parte, Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, ha negado estas afirmaciones.
La controversia se centra en una decisión tomada en la Comisión de Justicia del Congreso, donde partidos como el PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV, Junts per Catalunya y Podemos han acordado excluir del proyecto de ley de amnistía aquellos delitos de terrorismo que hayan causado «violaciones graves de derechos humanos». Este cambio permitiría potencialmente la amnistía de 12 miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) y 10 acusados por los disturbios relacionados con ‘Tsunami Democrátic‘, investigados por la Audiencia Nacional. Esto marca un cambio significativo respecto a la propuesta inicial del PSOE, que excluía de la amnistía casos de terrorismo con condena firme.
Miguel Tellado, portavoz parlamentario del Grupo Popular, ha expresado en el Congreso su preocupación por lo que considera una «cesión» del PSOE frente a Junts, calificando al gobierno de «amparar terroristas» y de atacar a los jueces, conductas que, considera, no son propias de una democracia moderna. Tellado ha descrito la situación en España como «dramática» y ha demandado la suspensión de la tramitación de esta ley de amnistía, tildándola de «error histórico».
Por su parte, Cuca Gamarra, secretaria general del PP, ha criticado al PSOE por eliminar lo que consideraba una «línea roja» hace solo una semana, refiriéndose a la amnistía de delitos de terrorismo con sentencia firme. Gamarra ha calificado este cambio de postura como un «pago» del presidente Pedro Sánchez por su posición en el gobierno.
Por su parte, Félix Bolaños ha defendido la posición del PSOE, asegurando que las enmiendas a la ley de amnistía son de carácter técnico y que mantienen el terrorismo como un delito exceptuado de su aplicación en casos de «violación grave» de derechos humanos. Según Bolaños, esto mejora la «seguridad jurídica» de la norma.
El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, ha negado estas afirmaciones, aclarando que los delitos que podrían ser amnistiados bajo esta ley se relacionan únicamente con el proceso independentista catalán y no incluyen otros delitos de terrorismo. Bolaños ha evitado pronunciarse sobre si hubo terrorismo en los disturbios de Cataluña, señalando que el Ministerio Fiscal no considera que se hayan producido actos terroristas y que se está a la espera de lo que decida la Audiencia Nacional.