Este fin de semana, intensas nevadas han afectado a diversas comunidades autónomas. La situación ha llevado a la imposición de medidas extremas como el uso obligatorio de cadenas y el corte de circulación en numerosas carreteras secundarias.
España se ve sumida en un manto de nieve tras una jornada de intensas precipitaciones que han dejado a su paso más que un paisaje invernal. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido alertas por todo el país, advirtiendo sobre las persistentes nevadas que han hecho necesario el uso obligatorio de cadenas en muchos vehículos, así como el cierre de vías en zonas montañosas.
Las comunidades de Castilla y León, Cataluña y Asturias se encuentran entre las más perjudicadas, con cortes de circulación que afectan a la vida diaria de sus habitantes y ponen en jaque la movilidad interregional. Este episodio climatológico no solo ha transformado el paisaje sino que ha supuesto un desafío logístico a comienzos del mes de marzo.
Según la AEMET, este domingo se mantiene la tendencia, con nevadas significativas previstas en el Pirineo y otras áreas montañosas del norte y centro de la península. La cota de nieve varía considerablemente, desde los 500 metros en el noroeste hasta los 1.800 metros en algunas zonas, complicando aún más la situación.
Restricciones de tráfico por nevadas
Las restricciones de tráfico se han intensificado, con la prohibición de circulación a camiones y vehículos articulados en tramos críticos de la A-2, A-1, y otras autopistas principales. Madrid, por su parte, enfrenta avisos amarillos en áreas como Navacerrada y Rascafría, con cadenas siendo una necesidad imperante.
El panorama en Aragón es igualmente desalentador, con carreteras intransitables y el uso obligatorio de cadenas en turismos.
En Cataluña, el cierre del paso por el puerto de la Bonaigua y las restricciones en Tarragona son solo un ejemplo de cómo el clima está moldeando la movilidad en la región.
Asturias y Cantabria no se quedan atrás, presentando múltiples puntos con nivel rojo y carreteras intransitables que complican aún más el escenario. La DGT ha emitido informes sobre puntos negros en varias montañas a lo largo del país, evidenciando la extensión del impacto de las nevadas.
En medio de este caos climático, la península y Baleares experimentan un fenómeno meteorológico complejo, con la presencia de dos frentes distintos que prometen mantener el ambiente inestable. Heladas débiles en el interior norte y vientos intensos con rachas fuertes en áreas costeras e interiores del este peninsular se suman a la lista de preocupaciones.
El pronóstico para los próximos días sugiere una mezcla de cielos nubosos y chubascos dispersos, con la esperanza de que las condiciones mejoren gradualmente. Sin embargo, la situación actual exige una respuesta coordinada y precaución por parte de los ciudadanos, especialmente aquellos que necesitan desplazarse.
Esta España es de récord: estará en los Juegos Olímpicos y en la final de la Nations League