Marta Ferrusola, empresaria catalana y esposa del expresident de la Generalitat Jordi Pujol, ha fallecido a los 89 años de edad. Ferrusola, nacida en Barcelona en 1935, había sido diagnosticada con Alzheimer en 2018 y sufrió una larga hospitalización hace cuatro años tras una caída en Queralbs, municipio donde la familia Pujol tiene una segunda residencia.
Marta Ferrusola sigue en estado «grave» en el Hospital Vall d’Hebron
Diagnóstico y archivo del ‘caso Pujol’
El diagnóstico de la enfermedad neurodegenerativa de Ferrusola no se hizo público hasta marzo de 2021, cuando la forense de la Audiencia Nacional confirmó que sufría un «deterioro cognitivo moderadamente grave». En enero de 2021, la familia ya había presentado pruebas de su condición. Debido a su estado de salud, se archivó su causa en el ‘caso Pujol’, una investigación sobre el patrimonio familiar que aún espera juicio.
Figura política y personal
Más allá de ser la esposa del expresident Pujol, con quien se casó en 1956, la trayectoria política de este no se puede entender sin Ferrusola, cofundadora de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC). De carácter conservador y religioso, acompañó a su esposo durante su presidencia de la Generalitat y tuvo una agenda propia, destacándose por sus opiniones controvertidas, como su oposición al matrimonio homosexual y al divorcio.
Ferrusola se hizo cargo de sus siete hijos mientras Pujol se dedicaba a la política, brindándoles apoyo en sus carreras empresariales. Famosas son algunas de sus declaraciones, como cuando en 2004 afirmó que a CiU le habían «robado» el Govern tras la entrada del tripartito, comparándolo con un robo en su propia casa.
Investigación y controversias
En la comisión de investigación del Parlament en 2015 sobre los presuntos cobros de comisiones y la ‘deixa’ del abuelo Florenci, Ferrusola declaró: «No tenemos ni un duro«. Su vida personal y política siempre estuvieron entrelazadas, manteniendo un sentimiento de agravio por lo que consideraba contribuciones no recompensadas de su familia al país.
Ferrusola nunca ocultó su creencia de que los sacrificios de su familia debían ser recompensados y no aceptó bien las acusaciones sobre tener dinero en Andorra. En la investigación del caso Pujol, se revelaron mensajes en los que supuestamente usaba lenguaje en clave religioso para dar instrucciones sobre el traslado de dinero a un banco andorrano, escapando así a los controles de Hacienda. La Fiscalía la consideraba una figura clave en la gestión de la fortuna familiar en Andorra.
Legado y últimos años
El juez De la Mata, instructor del caso en la Audiencia Nacional, propuso en 2020 juzgar a Ferrusola y a toda la familia Pujol por formar una organización criminal para enriquecerse durante décadas mediante actividades relacionadas con la corrupción. Aunque Ferrusola siempre negó estas acusaciones, su rol en el manejo de los negocios familiares fue significativo.
En los últimos años, Ferrusola permaneció voluntariamente recluida en su casa junto a su marido. Mientras Jordi Pujol, tras recuperarse de un ictus, retomaba gradualmente sus apariciones públicas, Ferrusola se mantuvo al margen, dejando atrás su papel de matriarca influyente.
La muerte de Marta Ferrusola marca el fin de una era en la política catalana, dejando un legado complejo y controvertido que seguirá siendo objeto de debate y análisis.
Como era de esperar, las muestras de cariño hacia Marta no se han hecho esperar y han sido muchos los rostros conocidos que han mostrado su tristeza públicamente: