Isabel Perelló, primera mujer en presidir el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Tribunal Supremo, ha realizado un firme alegato en defensa de la independencia judicial durante el acto de apertura del Año Judicial, celebrado en el Tribunal Supremo y presidido por el rey. En su intervención, Perelló subrayó que “ningún poder del Estado puede dar indicaciones ni instrucciones a los jueces” y pidió a los partidos políticos que respeten el trabajo de los jueces.
Isabel Perelló, nueva presidenta del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial
Un hecho histórico en la justicia española
Perelló destacó la relevancia de su nombramiento, al ser la primera mujer en ostentar la presidencia del Tribunal Supremo en más de 200 años de historia. Definió este momento como un «hecho histórico», reconociendo el avance que esto supone en el reconocimiento de la labor de las mujeres en la Justicia. Sin embargo, también advirtió que «aún queda mucho camino por recorrer» en cuanto a la representación femenina en los altos cargos judiciales, donde siguen siendo minoría.
Llamado a la protección de la independencia judicial
En su primer discurso, Perelló fue clara al señalar que las decisiones judiciales son susceptibles de crítica, ya que la discrepancia es parte inherente del debate jurídico, pero hizo hincapié en que dicha crítica debe evitar la descalificación y el insulto. «En esta nueva etapa», hizo un llamamiento a las fuerzas políticas y los poderes del Estado para que respeten el trabajo de los jueces y eviten ataques injustificados.
Además, resaltó que cualquier irregularidad en la función jurisdiccional tiene sus propios mecanismos de corrección a través de la ley, y enfatizó la importancia de salvaguardar la independencia judicial frente a posibles injerencias externas.
Desafíos en la cúpula judicial
Perelló reconoció la «ingente tarea» que tiene por delante, con cerca de un centenar de nombramientos pendientes en la cúpula judicial, incluidos 27 en el Tribunal Supremo, cuya situación actual calificó de «muy delicada». Aseguró que llevará a cabo este trabajo con rigor, transparencia y respetando los principios de mérito y capacidad.
En sus palabras, destacó la importancia de garantizar un sistema de selección de magistrados que asegure la elección de los mejores profesionales, subrayando que el nuevo Consejo está listo para afrontar este reto.
Un reconocimiento a la lucha de las mujeres
Perelló quiso aprovechar la ocasión para rendir homenaje a todas las mujeres que han luchado por la igualdad en la Justicia y en otros ámbitos profesionales y sociales. Recordó que en su juventud las mujeres no podían acceder a la carrera judicial y ahora representan la mayoría en la profesión, lo que considera un logro significativo, pero insistió en que es necesario continuar trabajando para que las mujeres ocupen más puestos de liderazgo.
Este primer discurso marca el inicio de una nueva etapa en la Justicia española bajo el liderazgo de Isabel Perelló, quien ha dejado claro que su mandato se centrará en proteger la independencia judicial, promover la igualdad y asegurar que los jueces puedan ejercer su labor con libertad y respeto.