¿Es posible hacer carrera política empezando en una ong? Hace unas horas hemos conocido que la que fuera alcaldesa de Barcelona durante los últimos dos mandatos, Ada Colau, tiene previsto dejar el acta de concejal (estaba en la oposición) para seguir haciendo política desde una fundación propia de Barcelona en Comú. Abandona sus funciones de coordinación en la formación, pero no cierra la puerta a presentarse dentro de tres años como candidata a la Alcaldía de Barcelona. Ella se dio a conocer hace más de 15 años como activista que luchaba contra los desahucios y la Plataforma Afectadas por la Hipoteca. Fue una de sus fundadoras y su portavoz hasta 2014. No finalizó sus estudios universitarios, pero su valor añadido en el mundo de la política venía del llamado Tercer Sector, el de las organizaciones no gubernamentales (ONG). Ha llegado a tener un sueldo público de 100.000 euros brutos anuales como alcaldesa, aunque su partido limita su ingreso neto, tal y como puedes comprobar en esta noticia. Su salario de concejal era de 96.300 euros.
Colau, al igual que decenas de perfiles políticos que nacieron tras el 15M y que acabaron en las filas de Podemos, no son funcionarios, ni grandes empresarios. Algunos sí proceden de familias acomodadas y han tenido recursos para estudiar y dar clases en la facultad. Muchos han trabajado en empleos precarios antes de obtener el acta de diputado en el Congreso de los Diputados o un acta de diputado autonómico o concejal.
Sin ir más lejos, el Consejo de Ministros aprobó el nombramiento de Nayua Miriam Alba Goveli como directora de Gabinete del ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 la semana pasada. El puesto tiene rango de director general y podrá cobrar más que su ‘jefe’. Sucede en el cargo a Ricardo Molero Simarro, que fue nombrado a finales de noviembre del año pasado. El ministro Pablo Bustinduy cobró 8.867 euros brutos por un mes y 10 días en 2023 en el cargo, según los datos disponibles en el Portal de la Transparencia de la Administración General del Estado consultados por Estrella Digital. Está en nómina desde el 21 de noviembre, al inicio de la legislatura presente. El sueldo de ministro ronda los 80.000 euros en 12 pagas, no tiene extras ni otro tipo de complementos. En cambio, Molero cobró 10.079 euros desde el 23 de noviembre hasta el 31 de diciembre. La información correspondiente a 2024, la parte proporcional hasta principios de septiembre, se dará a conocer durante los primeros meses de 2025. No obstante, y comparando retribuciones de los directores generales y el histórico publicado, Goveli podrá superar con creces los 63.500 euros aproximados que ingresaba un director general en 2023, según el BOE. En definitiva, podrá percibir cerca de 90.000 euros gracias al complemento de productividad que concede el titular del departamento, en este caso, Bustinduy.
Directora de Gabinete
Goveli no es la ‘típica’ licenciada en Derecho que después de terminar la carrera se ‘coloca’ gracias al partido. Tampoco es funcionaria ni pertenece a la sección juvenil de una formación política, pero lleva años vinculada a este mundo y ha escalado posiciones hasta llegar a ser la mano derecha de un ministro y tener rango de director general.
Su puesto se define como “órgano de apoyo político y técnico a la persona titular del Ministerio”. Los Gabinetes de los ministros están formados por un director y por un máximo de cinco asesores, con nivel orgánico de subdirector general. Los nombres de los asesores, su currículum y salario no aparecen publicados en Transparencia. No son considerados altos cargos.
Según el portal especializado Mundo Posgrado, el jefe o director de Gabinete debe poseer capacidad de liderazgo para inspirar y motivar al resto de miembros del equipo; desarrollar una comunicación efectiva, clara y persuasiva; tener dotes de buen negociador para resolver conflictos y solventar momentos de tensión; disponer de una mente analítica para evaluar información compleja, trabajar en equipo, lidiar con funcionarios, colaborar y delegar responsabilidades.
El director de Gabinete supervisa la agenda del ministro, cierra reuniones, ofrece su experiencia y conocimiento a modo de asesoramiento y análisis, realiza tareas de coordinación y supervisión de las políticas públicas y está en constante comunicación con el jefe o director de Comunicación o Prensa, el jefe de Protocolo del ministerio para el buen desarrollo de los eventos y participa en reuniones al más alto nivel dentro del ministerio. Es la mano derecha del ministro y tiene a su servicio personal administrativo, además de otro tipo de asesores.
Hace unos días, este digital se hizo eco del nombramiento de Diego Rubio como director de Gabinete del presidente del Gobierno tras cesar Óscar López en el puesto. Este asumió la cartera ministerial de Transformación Digital y Función Pública a la par que se hizo público la salida de José Luis Escrivá que dejaba el cargo para ocupar la plaza de gobernador del Banco de España. Eso sí, el director de Gabinete del presidente del Gobierno tiene rango de secretario de Estado; el de las vicepresidentas, rango de subsecretario; y el de los ministros, rango de director general.
Alba Goveli es licenciada en Psicología por la Universidad del País Vasco y máster en Psicología de la Educación por la Universidad Autónoma de Madrid. Ha sido coordinadora de campañas y comunicación digital en el Gabinete del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Por lo tanto, tiene experiencia en el propio ministerio. Fue diputada en el Congreso de los Diputados por la circunscripción de Gipuzkoa en dos legislaturas entre 2016 y 2019, donde ejerció de portavoz en las comisiones de Educación y de Políticas para la Discapacidad. Fuera de su etapa institucional, ha trabajado en el tercer sector como responsable de Movilización Digital en la ONG Amnistía Internacional y gerente de incidencia política e investigación en la ONG Plan International, según su biografía oficial publicada. También ha trabajado en el ámbito de la intervención social y la discapacidad en centros de la Asociación Guipuzcoana de Autismo (GAUTENA) y del Grupo Gureak.
Carles Torrijos
Fundador y director de Sueldos Públicos