Este miércoles se ha producido una imagen inédita en los últimos años: la fotografía entre el rey Felipe VI y el presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, tras la recepción en el Palacio de la Zarzuela. Un encuentro entre autoridades que podría ser de lo más común, sino fuera por que desde hace nueve años no se producía este encuentro. El último mandatario en hacerlo fue Artur Mas en 2015.
Carles Puigdemont, Quim Torra y Pere Aragonés como representantes del Govern en la última época, rechazaron estas audiencias con el jefe del Estado. Además de ser de corte independentista, el llamado ‘procés’ en la región catalana enfrió las relaciones con la Casa Real. De hecho, el Rey dio un discurso en contra del mismo ‘procés’, 48 horas después de celebrarse el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2019. «Estamos viviendo momentos muy graves para nuestra vida democrática», fueron algunas de sus palabras en aquel momento.
Estos ‘plantones’ también se han vivido en algunas visitas que Felipe VI ha hecho en Cataluña. Por ejemplo, Aragonés no recibió al monarca en el mes de mayo cuando éste acudió a la entrega del Premio del Círculo de Economía a la construcción europea 2024 celebrado en Barcelona.
«Normalidad institucional»
El Rey e Illa posaron primero ante los medios de comunicación, donde se estrecharon la mano. «Muy contento de estar aquí», afirmó el presidente catalán antes de ser recibido. Incluso Felipe VI lanzó un «qué bien» con cara de sorpresa ante la expectación mediática.
Tras el posado, ambos se dirigieron a una sala contigua para mantener el encuentro. Esta audiencia es un acto común por el que pasan los presidentes autonómicos tras ser investidos en sus respectivas regiones. La portavoz del Govern catalán, Silvia Paneque, declaró que se trataba de «normalidad institucional» esta reunión, como ya sucedió con la Diada 2024.