La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha criticado duramente este miércoles la «hipocresía» del Gobierno español al ser «incapaces» de ofrecer asilo a los 30 activistas saharauis retenidos en el aeropuerto de Barajas, mientras que, según sus palabras, acogen en el país a «opositores venezolanos peligrosos» como Edmundo González.
Durante una intervención en el Congreso, Belarra señaló que resulta de una «hipocresía insoportable» que el Ejecutivo haya enviado un avión de las Fuerzas Armadas a Venezuela para traer a González, quien, según la líder de Podemos, «alentaba la violencia» y «participó en la operación Cóndor», pero sean «incapaces» de proteger a los activistas saharauis que solicitan asilo.
«Marlaska no se digna a contestarme»
Belarra también aprovechó su discurso para censurar la inacción del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien acusó de ignorar sus intentos de contacto durante la última semana para abordar la situación de los saharauis en el aeropuerto de Madrid. «No se ha dignado ni a contestarme», dijo Belarra, subrayando que esta actitud refleja el desinterés del Gobierno por el drama humanitario que atraviesan los activistas.
La líder de Podemos recordó además que el pasado lunes se impidió el acceso a varios miembros de su partido, incluido ella misma, a la sala de inadmitidos del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, donde permanecen los solicitantes de asilo saharauis, situación que agrava, según ella, la falta de transparencia del Gobierno en este caso.
Discrepancias dentro del Gobierno
Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno respondió a Belarra recordando los acuerdos alcanzados entre el PSOE y Podemos «a pesar de las discrepancias», e hizo un llamado a la formación morada para «permanecer en el diálogo» con el objetivo de aprobar los Presupuestos Generales del Estado. Según la vicepresidenta, es necesario un esfuerzo conjunto para proteger el bienestar de los ciudadanos frente a la amenaza de la derecha y la ultraderecha.
Sin embargo, Belarra insistió en que el Ejecutivo ha sido «incapaz de cuidar la mayoría democrática» en la Cámara Baja durante los últimos meses, lo que está resultando en una serie de «derrotas políticas» que podrían perjudicar la gobernabilidad del país.
La tensión entre los socios de Gobierno es evidente, y la gestión de la política migratoria parece ser uno de los principales puntos de conflicto.