La Asamblea de Madrid ha dado luz verde este jueves a dos leyes que incluyen una serie de incentivos fiscales para fomentar la inversión extranjera en la región y para promover el asentamiento de los ciudadanos en municipios bajo riesgo de despoblación. Ambas iniciativas, impulsadas por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, fueron aprobadas con la mayoría absoluta del PP, pese al rechazo unánime de los partidos de la oposición.
La “Ley Mbappé”: incentivo a la inversión extranjera en activos financieros
Entre las iniciativas más destacadas se encuentra la deducción del 20% en el tramo autonómico del IRPF para los nuevos contribuyentes que trasladen su residencia fiscal a Madrid y realicen inversiones en activos financieros. Este incentivo, que incluye inversiones en bonos, letras del tesoro, acciones y sociedades limitadas, excluye específicamente las inversiones inmobiliarias y requiere que los beneficiarios mantengan tanto la inversión como su residencia en la región durante al menos seis años.
La iniciativa, popularmente conocida como la “Ley Mbappé”, ha sido criticada por todos los diputados de la oposición, quienes sostienen que la ley prioriza los beneficios para grandes fortunas extranjeras en detrimento de la población madrileña.
En este sentido, el diputado del PSOE, Fernando Fernández Lara, calificó la medida como “un insulto fiscal a la inteligencia de los madrileños”, destacando que esta reducción en la recaudación pública afecta de forma directa a los servicios esenciales en la Comunidad de Madrid. Además, Fernández Lara señaló que se trata de una medida “abiertamente contraria a los principios constitucionales de igualdad y de capacidad económica”, asegurando que el Gobierno regional “se ha extralimitado en sus competencias”.
Igualmente, desde Más Madrid, el diputado Eduardo Gutiérrez criticó la decisión del PP, argumentando que con esta ley de “regalos fiscales” no se “garantiza que las inversiones se queden en Madrid”, mientras se pierden “ingresos que podrían destinarse a mejorar los servicios públicos” en la región. Una medida que, según Gutiérrez, pretende convertir a Madrid en “la guarida de los defraudadores fiscales, de los más insolidarios ciudadanos adinerados del mundo”.
A este respecto, la diputada de Vox, Ana Cuartero, calificó la medida como una “soberana tontería”, cuestionando que el Gobierno de la Comunidad de Madrid no tenga “nada para los 28.000 habitantes de Paiporta, pero sí para 30.000 extranjeros”.
Pese a las críticas, la ley de deducciones fiscales para los inversionistas extranjeros fue aprobada gracias a la mayoría absoluta del PP, luego de que en la anterior legislatura Vox bloqueara su tramitación parlamentaria. Una normativa que entrará en vigor próximamente y que desde el PP defienden argumentando que va a generar una mayor recaudación y que va a incrementar el PIB al atraer nuevos contribuyentes a la región
Deducciones para vivienda en zonas despobladas y apoyo a jóvenes
Otra de las medidas aprobadas se centra en ofrecer deducciones fiscales para quienes se trasladen a municipios en riesgo de despoblación, además de una serie de incentivos destinados a facilitar el acceso a la vivienda. En este caso, los menores de 35 años podrán deducirse 1.000 euros en el IRPF, ya sea por la compra o el alquiler de una vivienda en pueblos con menos de 2.500 habitantes, además de una deducción adicional del 10% del precio de adquisición de la vivienda, con un límite anual de 1.546 euros, aplicable durante los primeros diez años.
Estos beneficios fiscales también incluyen bonificaciones del 100% en los impuestos de Transmisiones Patrimoniales (ITP) para viviendas de segunda mano y en Actos Jurídicos Documentados (AJD) para nuevas construcciones. De modo que la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo estima que estas medidas beneficiarán a aproximadamente 1.200 personas y generarán un ahorro fiscal total de 7 millones de euros.
Incentivos adicionales para propietarios de viviendas vacías y para hipotecas variables
La normativa también establece una deducción de 1.000 euros en el IRPF para pequeños propietarios que alquilen viviendas vacías por un periodo mínimo de tres años. Una medida que, según las estimaciones oficiales, beneficiará a unos 20.000 propietarios y generará un ahorro estimado de 20 millones de euros.
Por otro lado, en respuesta al impacto de la subida de los tipos de interés, se ha aprobado una deducción de hasta 300 euros en el IRPF para aquellos hipotecados con préstamos variables. Esta deducción es aplicable a la vivienda habitual, siempre que el valor de la propiedad no supere los 390.000 euros y la renta familiar per cápita esté por debajo de los 30.930 euros, pudiendo beneficiar a 450.000 personas y representando un alivio fiscal de aproximadamente 90 millones de euros.
Además, la ley amplía la deducción de arrendamiento de vivienda habitual, permitiendo que los contribuyentes de hasta 40 años puedan beneficiarse, frente al límite previo de 35 años. Con esta modificación, cerca de 45.000 contribuyentes adicionales podrán acogerse a esta deducción, generando un ahorro anual de 50 millones de euros.
De modo que estas ocho nuevas deducciones fiscales se suman al total de 29 medidas de reducción de impuestos que el Gobierno de Díaz Ayuso ha impulsado desde el inicio de su gestión, generando un ahorro fiscal para los ciudadanos madrileños estimado en más de 31.300 millones de euros. Todo ello, en el marco de la política de rebajas fiscales que mantiene a la Comunidad de Madrid como la región de España con la fiscalidad más baja y como la única comunidad sin tributos propios.