El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha descartado una intervención desde Ferraz para apartar a Lobato de la Secretaría General del partido en la Comunidad de Madrid, permitiendo que encabece la delegación al 41º Congreso Federal que se celebrará este fin de semana en Sevilla.
“Es el secretario general del PSOE-M, es lógico que vaya al Congreso el próximo sábado, nosotros no vamos a hacer nada”, declaró Cerdán con gran cautela en el Congreso de los Diputados, insistiendo en que cualquier decisión que se tome al respecto debe provenir del PSOE madrileño y no de la dirección nacional.
Por su parte, el ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, evitó respaldar a Lobato, subrayando que las explicaciones sobre el presunto “linchamiento” deben provenir directamente del líder madrileño. “El señor Lobato tendrá que explicarse él”, afirmó el ministro, aprovechando la ocasión para desviar la atención hacia el Partido Popular al asegurar que quien tiene que dar explicaciones por los delitos fiscales cometidos por su pareja es Ayuso y su jefe de Gabinete, Miguel Ángel Rodríguez.
Críticas y exigencias a Lobato desde Madrid
Pese al silencio estratégico de Ferraz, en el ámbito regional, las críticas hacia Lobato por registrar ante el notario su conversación privada con Pilar Sánchez Acera, asesora del líder madrileño y actual jefa de Gabinete del ministro Óscar López, no se han hecho esperar. En este sentido, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, calificó las decisiones de Lobato como “delicadas y graves” y exigió al líder de los socialistas madrileños que dé “explicaciones más sólidas” a los militantes del partido.
De esta manera, Martín insistió en la necesidad de convocar una reunión extraordinaria del Ejecutivo regional para abordar el tema y permitir que los militantes puedan expresar sus opiniones. “La confianza es un bien muy valioso, pero también frágil”, recordó Martín, instando a Lobato a reconstruir la credibilidad perdida dentro del partido.
Asimismo, el delegado del Gobierno criticó la estrategia de Lobato, advirtiendo que “la organización está por encima de cualquiera” y señalando que las distracciones en torno a este caso desvían la atención de los problemas realmente fundamentales, como los delitos fiscales atribuidos a la pareja de Isabel Díaz Ayuso.
En la misma línea, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, instó a Lobato a convocar “de manera extraordinaria” un Comité Ejecutivo Regional para dar explicaciones a la militancia y abordar la crisis generada por sus decisiones. “Juan Lobato tiene que volver a ganarse la confianza de una militancia que le hizo secretario general de todos los socialistas madrileños”, subrayó.
Además, la portavoz socialista aseguró que el Comité Ejecutivo Regional es “el ámbito adecuado” para que Lobato rinda cuentas y escuche a los militantes. “Somos muchos los que pedimos explicaciones, no sólo para aclarar lo sucedido, sino para evaluar si su liderazgo puede mantenerse tras las informaciones que han salido a la luz”, añadió Maroto.
Se trata, por tanto, de una postura de fractura y desconfianza dentro del PSOE madrileño que contrasta con la decisión de no intervenir que sostienen desde Ferraz para evitar que este conflicto regional opaque los debates nacionales durante el Congreso Federal de este fin de semana en Sevilla.
Lobato denuncia un “linchamiento” interno y descarta dimitir