Los ministros de Pesca de la UE han alcanzado un acuerdo unánime sobre las cuotas de pesca en aguas comunitarias del Atlántico y Mediterráneo para 2025. Este pacto contempla una reducción del esfuerzo pesquero para los arrastreros, pero introduce mecanismos de compensación que permitirán aumentar los días de pesca si se adoptan prácticas más sostenibles.
Reducción del esfuerzo pesquero con incentivos a la sostenibilidad
Tras dos intensos días de negociaciones en Bruselas, marcados por la firme oposición de España al planteamiento inicial de la Comisión Europea, se ha pactado una reducción del 66% de los días de pesca de arrastreros en aguas españolas y francesas del Mediterráneo occidental. En el caso de aguas francesas e italianas, la reducción será del 38%.
Para mitigar el impacto socioeconómico, se han establecido medidas de compensación. Según explicó el comisario europeo de Pesca, Costas Kadis, los pescadores podrán recuperar días de actividad si se comprometen con prácticas sostenibles que mejoren la selectividad de sus capturas y protejan los alevines.
Frente común de las CCAA del Mediterráneo contra la propuesta de la UE de reducir los días de pesca
Por ejemplo, un barco que emplee mallas de 15 milímetros bajo determinadas condiciones podrá aumentar sus jornadas en el mar hasta un 50% adicional. En total, se han identificado 12 medidas acumulativas que permitirían a las embarcaciones mantener prácticamente el mismo número de días de pesca que en 2024.
La posición de España en las negociaciones
La propuesta inicial de la Comisión Europea implicaba una reducción del 79% de los días de pesca en el Mediterráneo para la flota española, limitando a los barcos de arrastre a solo 27 jornadas anuales. El ministro de Agricultura y Pesca español, Luis Planas, calificó esta propuesta como «claramente inaceptable» y lideró las negociaciones junto a Francia e Italia para alcanzar un acuerdo más equilibrado.
Planas destacó que España defiende medidas alternativas, como la exclusión de zonas de pesca, que ya han demostrado resultados positivos en años anteriores. Finalmente, la alianza entre los tres países mediterráneos permitió plantear una solución técnica que fue aceptada por el Consejo.
Financiación para la transición hacia una pesca sostenible
El acuerdo también incluye financiación del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y Acuicultura, destinada a apoyar a los pescadores en la adopción de estas medidas sostenibles. Esta ayuda busca garantizar que la transición no comprometa la viabilidad económica del sector ni afecte gravemente a las comunidades pesqueras.
Impacto y objetivos del acuerdo
La Presidencia húngara del Consejo de la UE destacó que este pacto persigue mantener las poblaciones de peces en niveles sostenibles, proteger el medio marino y asegurar la competitividad del sector pesquero.
El mensaje es claro: se podrá continuar pescando prácticamente los mismos días, pero de una manera más respetuosa con el entorno. Con este acuerdo, la Unión Europea reafirma su compromiso con la sostenibilidad sin olvidar las necesidades de sus pescadores.