La Audiencia Provincial de Madrid ha sentenciado al exministro de Economía y exgerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, a cuatro años, nueve meses y un día de prisión, tras ser considerado culpable de tres delitos contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales y corrupción entre particulares. Además, el tribunal ha impuesto multas superiores a dos millones de euros y el pago de 568.413 euros a la Hacienda Pública.
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Un juicio marcado por dilaciones y una compleja trama financiera
La sentencia, que abarca más de 1.200 folios, llega tras un proceso judicial que se ha extendido durante más de nueve años. Estas dilaciones indebidas han sido calificadas como «muy cualificadas» y han llevado a una reducción de la pena por el delito de corrupción.
El tribunal considera probado que, durante el ejercicio fiscal de 2006, Rodrigo Rato mantenía la totalidad de su patrimonio e intereses económicos en España, a pesar de residir en Washington como director gerente del FMI. Aunque presentó su Declaración Tributaria Especial en 2012, esta no incluía la cantidad defraudada en ese ejercicio.
Complicidad en los delitos
El tribunal también ha condenado a Domingo P.R., administrador de la sociedad Kradonara, utilizada por Rato para transferir dinero desde el extranjero a España. Según la sentencia, Kradonara firmó un contrato de asesoramiento macroeconómico con Telefónica, simulando que la empresa ofrecía los servicios, cuando en realidad era Rato quien los realizaba. Domingo P.R. ha sido sentenciado a 18 meses de prisión y deberá abonar una multa de más de 155.000 euros, además de responder solidariamente junto a Rato por los daños a Hacienda.
Por otro lado, Alberto P.C. ha sido condenado a tres meses y un día de prisión por el delito de corrupción entre particulares. Este delito está relacionado con la imposición, junto a Rato, de las agencias Publicis y Zenith para contratos con Bankia, con el objetivo de obtener una comisión total de más de dos millones de euros. El tribunal también ha decretado el comiso de dicha cantidad.
Absueltos la mayoría de los acusados
En un giro relevante, el tribunal ha absuelto al resto de los imputados, incluidos empleados de Publicis y Zenith, así como a colaboradores cercanos de Rato en Bankia, al no encontrar pruebas de su participación en los actos corruptos. También han sido absueltos otros acusados, como Santiago A. por blanqueo de capitales y Ramiro S.L. en relación con el contrato de Telefónica.
Una sentencia recurrible
La defensa de Rato y otros condenados puede recurrir la sentencia ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo, prolongando aún más un caso que ha sacudido las bases de la política y la economía española.
Este fallo cierra, al menos de momento, uno de los capítulos más controvertidos en la trayectoria del que fuera una de las figuras más influyentes de la política y las finanzas en España. Sin embargo, el eco de sus actuaciones sigue marcando el debate público sobre la transparencia y la rendición de cuentas en las instituciones.