La presentadora Laura Yustres, conocida como Lalachus, mostró una estampita del Sagrado Corazón de Jesús con la cabeza de la vaquilla del Grand Prix durante las campanadas de fin de año, motivo que causo la denuncia.
La polémica surgió tras la emisión de las campanadas, cuando el presidente de RTVE compartió en la red social X (anteriormente Twitter) una imagen de la presentadora sosteniendo la estampita acompañada del mensaje: «Feliz de trabajar con gente que arriesga». Este gesto ha sido interpretado por la organización como un apoyo o incluso como parte de una estrategia premeditada para generar controversia.
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Acusaciones de burla hacia el cristianismo
Desde Abogados Cristianos han asegurado que el uso de la imagen del Sagrado Corazón de Jesús con la figura de la vaca del Grand Prix constituye una falta de respeto hacia los símbolos religiosos del catolicismo. En su denuncia, la organización considera que este acto implica una vejación, injuria y ultraje hacia los sentimientos religiosos de los católicos y forma parte de una tendencia creciente de ataques hacia esta confesión.
La presidenta de la fundación, Polonia Castellanos, ha declarado que «estos comportamientos no pueden quedar impunes» y ha señalado que «la cristianofobia se está normalizando en espacios públicos como RTVE». Además, ha recordado que no es la primera vez que la televisión pública utiliza la polémica con contenido religioso para atraer audiencia, citando como ejemplo la inauguración de los Juegos Olímpicos.
Críticas a otras figuras de RTVE
En el comunicado, Abogados Cristianos también ha criticado la contratación de Mr. Jagger, un creador de contenido conocido por lo que califican como «continuas vejaciones hacia los católicos». Según Castellanos, estas decisiones editoriales reflejan un «rechazo cada vez más evidente hacia los cristianos» en el ámbito de la televisión pública.
Repercusiones legales y mediáticas
La denuncia plantea un nuevo debate sobre los límites del humor y la libertad de expresión en la televisión pública. Por el momento, ni José Pablo López ni Laura Yustres han emitido declaraciones oficiales al respecto. Mientras tanto, el caso sigue generando reacciones en redes sociales, dividiendo opiniones entre quienes defienden la denuncia y quienes consideran que no hay motivo para ella.
El desenlace legal de esta polémica será clave para determinar si este tipo de contenidos pueden considerarse libertad creativa o constituyen una ofensa punible.