El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha fallado en contra de la empresa del productor Nacho Cano, obligándola a indemnizar con 11.882,95 euros a Aitor Antruejo, uno de los artistas del musical ‘Malinche’, por despido improcedente. Este caso se suma a un historial de controversias legales en torno a la producción del exitoso espectáculo.
Despido de Malinche y disputa contractual
Según la sentencia, el artista trabajó para ‘Malinche’ desde el 1 de agosto de 2022, participando activamente en el estreno del musical el 15 de septiembre de ese mismo año. Sin embargo, el 25 de abril de 2023, la productora comunicó la extinción de su contrato alegando una supuesta «disminución voluntaria y continuada» del rendimiento laboral, argumento que posteriormente fue desestimado.
El fallo del TSJM ratifica que el despido fue improcedente, tras constatar que la empresa intentó aplicar un convenio distinto al que correspondía. Mientras la productora defendía que debía aplicarse el Convenio Colectivo del Sector de Profesionales de la Danza, Circo y Variedades, que hubiera reducido la indemnización a unos 2.000 euros, el tribunal sostuvo que el demandante estaba amparado por el Convenio de Actores y Actrices de la Comunidad de Madrid, que estipula cinco mensualidades de salario como compensación.
Precedentes y consecuencias legales
La resolución se basa en una sentencia anterior contra la misma productora por un caso similar, lo que refuerza el patrón de discrepancias legales en las relaciones laborales dentro del proyecto ‘Malinche’. Este nuevo fallo supone otro revés para la empresa, que se encuentra bajo el escrutinio público y judicial.
El productor Nacho Cano tendrá que acudir como imputado a los Juzgados de Plaza Castilla de Madrid el próximo 13 de enero, para esclarecer si trajo a casi una veintena de becarios desde México bajo la apariencia de turistas, presuntamente para trabajar y formarse en el musical.
Un caso que marca la industria teatral
El desenlace judicial subraya la importancia de respetar los convenios colectivos establecidos en el sector de las artes escénicas y marca un precedente para futuros conflictos laborales en producciones de gran escala.