El reciente acuerdo entre Israel y Hamás para un alto el fuego en la Franja de Gaza ha generado un amplio abanico de reacciones en la política española. El pacto, que incluye la liberación de rehenes y la posibilidad de enviar ayuda humanitaria a la zona, ha sido calificado por las principales fuerzas políticas del país como una noticia positiva, aunque sus interpretaciones y prioridades reflejan las diferencias ideológicas existentes en torno al conflicto palestino-israelí.
En este sentido, el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, celebró el alto el fuego, describiéndolo como «un paso indispensable” hacia la solución de los dos Estados y hacia «una paz justa y respetuosa con el derecho internacional». En una publicación en su cuenta de X, Sánchez subrayó que el acuerdo debe contribuir a aliviar «la terrible situación humanitaria en Gaza» y a garantizar «la liberación de todos los rehenes». Asimismo, el presidente aseguró que estamos ante un acuerdo «crucial para lograr la estabilidad regional», agradeciendo a países como Qatar, Egipto y Estados Unidos por su «incansable labor» como mediadores en este proceso.
Por su parte, desde el Partido Popular (PP), su líder, Alberto Núñez Feijóo, expresó su satisfacción por el acuerdo, calificándolo como «una buena noticia esperada por mucho tiempo». A través de un mensaje en la red social X, Feijóo también consideró el alto el fuego como «un paso adelante en la solución del conflicto», subrayando la importancia de que este «se confirme y mantenga». Además, el líder popular enfatizó en la necesidad de que se liberen los rehenes de ambas partes y que la ayuda humanitaria sea «distribuida sin obstáculos».
No obstante, desde Sumar, la reacción fue mucho más enérgica y con un enfoque centrado en la justicia internacional y la responsabilidad de los implicados en el conflicto. En este sentido, la líder de la formación y vicepresidenta segunda del Gobierno expresó su «alivio y alegría» por la noticia, pero insistió en la necesidad de seguir trabajando para que «el derecho internacional se cumpla y el genocidio no quede impune». «Tras 467 días de horror, esta buena noticia debe ser el primer paso para reconstruir Gaza y garantizar la libertad del pueblo palestino», subrayó Díaz.
En la misma línea, el ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, también calificó el alto el fuego como «esperanzador», aunque advirtió que la paz «solo será posible cuando se reconozca la existencia de un Estado palestino viable y los responsables de los graves crímenes cometidos respondan por ellos ante la Corte Penal Internacional».
Además, a través de un mensaje en su perfil oficial de X, Sumar se pronunció sobre la importancia de consolidar el acuerdo como base para la construcción de un Estado palestino, el «inicio de la reconstrucción de Gaza» y el fin de la «impunidad» del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Por su parte, la eurodiputada de Podemos y número dos de la formación, Irene Montero, afirmó que este alto el fuego «urgía desde hace un año», criticando que «los genocidas», en alusión a Israel, «aceptan ahora lo que rechazaron en mayo y julio». Asimismo, en su mensaje en X, Montero arremetió contra Estados Unidos y Europa por su apoyo a Israel. «El acuerdo demuestra además que EEUU y Europa podían haber parado esta barbarie y no lo hicieron: son también responsables del genocidio por su apoyo a Israel», escribió la eurodiputada.
De modo que, mientras el PSOE y el PP ponen el foco en la estabilidad, el alivio humanitario y la consolidación de la tregua, Sumar y Podemos insisten en la justicia internacional, el reconocimiento del Estado palestino y la necesidad de responsabilizar a los culpables de los crímenes cometidos en la región.
Claves del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza