La comisión de investigación en la Asamblea de Madrid sobre la cátedra de Begoña Gómez en la Universidad Complutense ha quedado suspendida este miércoles debido a la ausencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien había sido citado a declarar por el PP. Ante esta situación, la presidenta de la comisión, Susana Pérez Quislant, ha decidido interrumpir la sesión hasta que el Consejo de Estado determine si Sánchez debe comparecer en calidad de “esposo” de la principal investigada o si, por el contrario, su cargo como presidente del Gobierno lo exime efectivamente de la citación.
Bajo este contexto, el PP ha anunciado que, una vez concluida la comisión, remitirá su dictamen a la Fiscalía y al juzgado que investiga el ‘caso Begoña Gómez’ con el objetivo de “poner en conocimiento” de las autoridades judiciales “todos los condicionantes y circunstancias de facto” que apuntan a “posibles indicios o posibles delitos”. “Obviamente, tenemos nuestras conclusiones ya en mente, pero tenemos que trabajar en ese documento que, además, desde luego, enviaremos a la Fiscalía, que es lo que corresponde, y quizá también al juzgado competente en el conocimiento y en la investigación de estos hechos”, ha afirmado la portavoz del PP, Mercedes Zarzalejo.
El testimonio del exvicerrector de la UCM y el silencio de la asesora de Begoña Gómez en Moncloa
A pesar de la ausencia de Sánchez, han comparecido este miércoles en la Cámara autonómica dos figuras clave para la investigación: Cristina Álvarez, asesora de Begoña Gómez en Moncloa, y Juan Carlos Doadrio, exvicerrector de Planificación, Coordinación y Relaciones Institucionales de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
Durante su turno en el estrado, Álvarez, imputada por el juez Peinado por su presunta participación en un delito de tráfico de influencias y corrupción en los negocios, ha optado por acogerse a su “derecho a no declarar”, tal como hizo días antes en el Senado, argumentando que todo lo que tenía que decir en relación al objeto de esta comisión ya lo había expuesto en su declaración como testigo ante el juez de instrucción el pasado 20 de diciembre.
Sin embargo, las diputadas Mercedes Zarzalejo (PP) y Ana Cuartero (Vox) han planteado igualmente las preguntas que habían preparado, en un interrogatorio en el que se han colado acusaciones y dudas sobre la actuación de Álvarez como asesora en Moncloa y sobre su implicación en las actividades de Gómez en la UCM, a pesar de que el tribunal aún no ha emitido conclusiones sobre este asunto.
Por el contrario, Doadrio ha ratificado lo que ya declaró en julio ante el juez Juan Carlos Peinado, asegurando que se sintió “obligado” por el rector de la Complutense, Joaquín Goyache, a crear la cátedra de Begoña Gómez. En concreto, Doadrio ha explicado que en septiembre de 2020 recibió varios mensajes de WhatsApp de Goyache instándole a reunirse con él y que, tras insistir por escrito, el rector procedió a llamarlo para trasladarle una orden directa: “Tenemos que crear una cátedra para Begoña Gómez, la mujer del presidente”.
En este sentido, el exvicerrector ha asegurado que, aunque en su momento respondió a Goyache que no tenía inconveniente, siempre y cuando la documentación estuviera en regla, lo cierto es que la solicitud de su superior no dejaba margen para la negativa. “No me sentí presionado, pero sí obligado, porque era mi jefe”, ha afirmado, expresando su sorpresa por la rapidez con la que se gestionó la cátedra y subrayando que, a pesar de que hubo algunas cuestiones que “en las formas” no le parecieron correctas, no ha logrado constatar ninguna irregularidad.